Literatura en 140 caracteres
En la segunda edición de #TwitterFiction participan 50 escritores, entre ellos una española
Ese fue el primer paso para Rosa del Blanco. Un microcuento que le valió la oportunidad de medirse, en 140 caracteres (los que tiene un post de Twitter), contra otros 50 escritores del mundo en la segunda edición de #TwitterFiction, certamen literario que organizan Twitter, Penguin Random House y la AAP, la asociación de editores estadounidenses, y que durará cinco días, desde ayer hasta el próximo domingo 16 de marzo. "No tenía ningunas expectativas cuando me presenté. Llevo año y medio escribiendo microliteratura en Twitter y esta es la oportunidad que esperaba para tener más proyección", confiesa esta madrileña de 32 años, única representante de España en el #TwitterFiction.
Adán encontró la manzana en un bar. La devoró en el baño. Después pensó en cómo podría volver a mirar a Eva a los ojos".
Del Blanco comparte ciberespacio literario con otros 50 escritores durante estos cinco días. 25 fueron seleccionados como ella, por una convocatoria abierta a recibir proyectos literarios concebidos para Twitter. Y 25 son autores profesionales de todo tipo del género, best-sellers del The New York Times como Anthony Marra (A constellation of vital phenomena) o J. Lynn (Nephilim Rising, Gamble Brothers), ganadores del Emmy como Bernie Sue o periodistas reputados con escarceos literarios como Elizabeth Fremantle (Vogue, Elle, Vanity Fair y The Sunday Times). Además, cualquiera puede contribuir durante todo el festival posteando una historia con el hashtag #TwitterFiction.
El certamen es muy flexible en sus condiciones. Los autores tienen libertad para plantear cómo quieren abordar su proyecto literario y el certamen parcela los cinco días para que cada uno goce de un escaparate en un determinado horario. La novelista hindú Meghna Pant se atreverá a resumir las 100.000 líneas del segundo texto literario más extenso de la historia en tan solo 100 tuits; lo hace de madrugada las 2.00 de Nueva York (7.00 en España) los cinco días. El terror tendrá también su espacio: el australiano Omar J. Sakr asumirá el papel de un muerto que de pronto se ve atrapado entre las bambalinas digitales; su viaje al más allá comienza el viernes 14 a las 7.00 (12.00). Otro que jugará a inquietar es el autor mexicano Alberto Chimal: "Voy a crear una serie de tuits que reunirán texto e imagen para lograr un efecto siniestro. Se van a presentar como las fotografías que toma un personaje a lo largo de un día común; en las imágenes no se verá nada inquietante, pero el texto de cada una sugerirá que algo extraño, o terrible, está pasando justo más allá de lo que sí podemos ver". El personaje en cuestión será Horacio Kustos, protagonista de algunos de sus cuentos y novelas. El domingo 16 de marzo a las 13.00 (18.00) y las 3.00 (8.00) del lunes 17 de marzo tendrá su oportunidad.
Rosa del Blanco dará lo mejor de las más de 1.000 obras que ha acumulado en año y medio. Su “momento de gloria” vendrá por partida doble. Lo tuvo hoy a las 6.00 (11.00) de hoy y lo tendrá mañana a la misma hora. La temática de sus relatos será intimista, bordeando lo poético y muy centrados en los sentimientos de la mujer. “Hablo de todo. De sentimientos, de relaciones de pareja, de lo que nos inquieta. Del ser humano. Y lo que me fascina es que en 140 caracteres dejas mucho espacio a la imaginación del lector”.
Twitter como vía literaria está en creciente expansión. Autores como Sean Hill se han hecho con una enorme audiencia, más de 190.000 seguidores de su Very Short Stories en la que escribe historias post a post desde 2009, que luego le han permitido dar el salto a la novela: Very Short Stories (Ulysses Press, 2013). El camino inverso, de la literatura a Twitter y vuelta a empezar fue la tarea que se plantearon Alexander Aciman y Emmet Rensin, dos estudiantes de la universidad de Chicago, que convirtieron 80 clásicos de las letras —Hamlet, El gran Gatsby o la saga de Harry Potter entre ellos— en como máximo 20 tuits; la recopilación fue publicada precisamente por Penguin Books bajo el título de Twitterature. Y el uso imaginativo de la herramienta ha llegado hasta a crear relatos a base de retuits. Eso ha hecho Teju Cole, un autor de 38 años alabado por el The New York Times que ha compuesto un relato a modo de cadáver exquisito, alimentándose retuit a retuit para crear un relato que empezaba así: “…en el metro, cuando vi a un hombre en el suelo. Se sentaba en la acera, bajo los árboles, con sus pies al aire sobre la silenciosa calle”. El autor confirmó después que la historia estaba escrita de antemano y que los retuiteadores se limitaban a subir cada nuevo fragmento. Pero la experiencia creada para los lectores fue de una literatura viva y naciente al momento.
La efervescencia creativa al abrigo del pajarillo azul está clara. Otra cosa si estos y otros experimentos para sacar la literatura de sus moldes son rentables al corto y medio plazo. Carmen Ospina, directora de la sección digital de Random House para España y Latinoamérica, cree que aún hay mucho por hacer: “La mayoría de las ventas está en las librerías aún. Los experimentos literarios son muy interesantes y queremos apostar por ellos. Pero de momento no ha habido ningún proyecto de literatura transmedia [que fusione varias vías a través de lo digital] que haya roto moldes”. Pero puede estar por llegar. Rosa del Blanco, la representante española en #TwitterFiction, lo tiene muy claro: “Llevo un año tratando de inventar la tuitliteratura. La gente más joven lee cada vez más rápido mientras hacen mil cosas en Internet y piden este tipo de historias. Todo está por hacer. Esto solo está empezando”.
En un siglo futuro muebles, máquinas, ropas son exactamente los de '2001' de Kubrick. Creen que el cine es real, dice el Viajero del Tiempo". Alberto Chimal (Toluca, México, 1970)
Babelia
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.