El gol es monopolio de Messi

Leo Messi viste la camiseta con el 10, símbolo del jugador por excelencia, y marca más goles que el mejor de los 9, el dorsal que normalmente identificaba al pichichi del equipo, de manera que hoy aglutina a dos jugadores en uno y responde por ambos, para suerte del Barcelona. El argentino asumiría por tanto los goles que le corresponderían a los delanteros centro que se ha comido desde que Pep Guardiola y Tito Vilanova le sacaran de la banda y le situaran en el frente de ataque del Barça. La progresión del azulgrana ha ido en aumento como cañonero. Ahora mismo está en racha: 88 goles durante el año 2012, 10 en los últimos cinco partidos de Liga, dos en su estreno copero el miércoles pasado en Córdoba, y el domingo (21.00, Canal+ 1) se enfrenta al Atlético en el Camp Nou.

El Atlético es el rival preferido de Messi, por encima incluso del Madrid (15 goles), o al menos es el adversario al que más tantos le ha marcado: 18 en 14 partidos (15 en 12 de Liga), 10 en los últimos cinco enfrentamientos, con un total de tres tripletes —dos en las dos últimas visitas rojiblancas al estadio— y dos dobletes. Únicamente no ha marcado en cuatro de los 14 encuentros y se superó cuando el partido se planteó como un duelo con el Kun Agüero. Ahora es Falcao quien aparece como competidor de Messi, quien curiosamente también se estrenó como francotirador ante el Atlético: batió de tiro libre a Coupet cuando el portero organizaba la barrera el 4 de octubre de 2008.

El Barça tiene un 70% de posesión. Así Messi descansa y sobresale” Michael Laudrup

Vive el Barcelona más que nunca de los goles de Messi, quien totaliza 32 en la temporada, por ocho de Villa, tres de Tello, dos de Pedro y solo uno de Alexis. El tercer máximo anotador del equipo es Cesc Fàbregas, con siete, mientras que Adriano suma cinco por cuatro de Xavi y tres de Jordi Alba e Iniesta. Messi, elegido ayer como mejor jugador del año 2012 por la revista World Soccer, ha marcado 32 tantos de los 73 en total del Barcelona (44%). Falcao aporta el 36% de los goles del Atlético (19 de 53) por el 34% de Cristiano en el Madrid (22 de 64). Las cifras avalan hasta cierto punto la sensación de que solo el 10 marca goles en el equipo de Vilanova.

Michael Laudrup, jugador deciviso en el dream team de Johan Cruyff, precursor de la figura del falso 9 hasta la llegada de Romario, argumenta el protagonismo del argentino: “Lo que es grandioso sobre Messi y el Barça es cómo se complementan. Si tienes a un equipo que posee el balón durante el 70% del tiempo como el Barcelona, Messi puede descansar. Entonces, cuando le das la pelota, él sobresale, tanto marcando goles como haciendo asistencias a sus compañeros”. Y el entrenador del Swansea remacha: “Si miras los partidos del Barça, hay 19 jugadores en 20 o 25 metros. No hay espacios, no puedes correr”.

Es el único al que nunca se ha corregido en la cantera” Jaume Olivé, excoordinador del fútbol base del Barça

Igualmente ilustrativo se muestra Mascherano, uno de los amigos de Messi en el Camp Nou y en la selección de Argentina: “Leo es un asesino futbolísticamente hablando”, comentó en una entrevista a Rac 1. “Entra dentro del campo para coleccionar víctimas. Es su gran virtud. Le gusta jugar al fútbol y no le importa quién está al frente. Compite contra él mismo. Ha llegado a ese nivel. Parece más un jugador de golf que uno de fútbol porque cada día quiere bajar su hándicap. Messi ha conseguido dominar el juego; mientras que para el resto de futbolistas el juego les domina”. También se ha pronunciado el técnico colombiano Pacho Maturana: “A Leo ya no se le compara con los contemporáneos sino con la historia. Hay delanteros que en toda su carrera no han llegado a 88 goles y él lo ha hecho en un año. Además, es que ni se inmuta. Nunca le vi obsesionado. Le sale natural”.

Los distintos entrenadores azulgrana que han contado con Messi en sus respectivos equipos coinciden en que es un futbolista tan inteligente que “la prioridad es encontrar el mejor sitio en la cancha para aprovechar sus cualidades”. “Yo diría que es el único de los jugadores a los que nunca se ha corregido en los equipos inferiores”, recuerda Jaume Olivé, excoordinador del fútbol base del Barça. “Hubiera sido un error intentar que hiciera los mismos ejercicios que se ordenan a los demás. Leo interpeta el juego y los demás interpretan a Leo. Así ha funcionado en el Barcelona”.

Guardiola y ahora Vilanova han entendido que el puesto ideal de Messi es el de falso 9 porque le permite estar en permanente contacto con el balón. El liderazgo del argentino en el equipo ha aumentado en la misma proporción que su jerarquía en el campo. Últimamente oficia incluso de portavoz y comparece más a menudo en la sala de prensa, cosa que no sucedía en tiempos en que el plantel contaba con figuras del calibre de Ronaldinho, Eto’o o Ibrahimovic. Hoy es el único ego permitido en el Barça. Nadie le discute la condición de número uno del mundo, ni siquiera quienes compiten con los máximos galardones, como Xavi e Iniesta.

Ahora se habla del Barcelona de Messi. El jugador disfruta más que nunca del fútbol y su única preocupación de momento ha sido el golpe que recibió en la rodilla izquierda durante el partido contra el Benfica en la Liga de Campeones. Asegura Vilanova que si se le nota más feliz desde entonces es porque temió que se había lesionado y no pensaba disfrutar de los goles que marca.

Resolutivo en Córdoba, el domingo tiene un nuevo reto contra el Atlético de Falcao. Nada le motiva más que enfrentarse a un rival que le disputa cualquier galardón. El colombiano se presenta como una nueva amenaza después de la permanente de Cristiano, el único que precisamente ha salido sin perder del Camp Nou en la Liga después del empate alcanzado por el Real Madrid. Aunque no precisa de motivación, porque compite contra sí mismo, Messi quiere ser más que nunca el 10 que marca más goles que el mejor 9.