Un Madrid brillante no da opción a un Cáceres sin ideas

El Real Madrid de la era Sabonis empieza a funcionar. Los jugadores blancos van aprendiendo el catecismo de Clifford Luyk y, al mismo tiempo, recuperan la confianza y la forma fisica. Están reuniendo los ingredientes necesarios para poder formar un equipo campeón.

El Cáceres llegaba a Madrid eufórico, tras aplastar al actual campeón, el Joventut, en la primera jornada de Liga. El entusiasmo le duró poco más de tres minutos. Justo lo que tardó Arvidas Sabonis en poner un tapón, meter un par de canastas fáciles y cargar al pívot Berwald con tres faltas personales. Hizo añicos el partido. En el minuto 10 la diferencia ya era de 10 puntos a favor de los locales (24-14).

El equipo extremeño nunca tuvo opción de victoria, y fue en todo momento un juguete en manos de los jugadores blancos. Sólo un Pritchard rapidísimo, obsesionado por entrar a canasta en lugar de buscar buenos pases, y el inteligente Berwald supieron crear peligro. Su compañeros deambularon por el parqué entre asustados e indecisos, sin encontrar la posición y con la muñecas y las neuronas visiblemente agarrotadas.

Pero el Madrid no se encontró con el rival en estas precarias condiciones. Su gran mérito fue destrozarles hasta ese extremo. El equipo entrenado por Luyk descompuso al extremeño, y le obligó a cambiar por completo su estrategia. Primero fueron los marcajes individuales: todos probaron suerte con Sabas, y todos fracasaron. Soler, potente como un tren de mercancías, descarriló y fue a estrellarse contra un estilista llamado Ricky Brown. A Reyes, Portillo, Méndez y Freixanet sólo se les vio en la presentación del equipo...

En la segunda mitad, Martín Fariñas, entrenador del Cáceres, se vio obligado a tomar medidas drásticas. Lamentablemente sólo se le ocurrió abandonar la defensa al hombre. Su equipo, tocado ya en la línea de flotación, se. hundió sin remisión en el fango de una zona mediocre. Los madrileños se encontraron con una puerta abierta y bombardearon con precisión la canasta contraria. Simpson y, como no, el omnipresente Sabonis, metieron seis triples de nueve intentos. Apareció la maxima diferencia en el marcador, 84-59, y se esfumó el partido.

Otros resultados

La jornada que se disputó ayer se completó con los siguientes partidos: Dyc Breogán, 68; Zaragoza, 83. Taugrés, 101; Júver Murcia, 66. Coren Orense, 69; Elosúa, León, 83. Andorra, 56; OAR Ferrol, 68.