La intervención municipal de Cádiz urge a tomar medidas ante la delicada situación financiera

El Ayuntamiento de Cádiz, gobernado por el PP, atraviesa una delicada situación financiera. Las arcas municipales arrastran una deuda de 13.175 millones de pesetas y un déficit de 3.571 millones, según el informe sobre la liquidación del presupuesto del año 2000 elaborado por la intervención municipal, que pide al gobierno local que apruebe un nuevo plan de saneamiento para afrontar los presupuestos de 2002. El PSOE agravó este análisis negativo al informar que el déficit no incluye entre 2.500 y 3.000 millones de derechos pendientes de cobro de difícil o imposible ejecución y que al Ayuntamiento le urge encontrar 6.000 millones en efectivo para poder hacer frente a los pagos a proveedores.

El Ayuntamiento de Cádiz aprobó el 7 de abril del 2000, con los votos del PP, el presupuesto de ese año que contemplaba unos ingresos de 14.733 millones de pesetas y 13.541 millones de gastos. El documento presupuestario incorporaba un nuevo plan de saneamiento para los siguientes cinco años con la premisa de absorber el déficit municipal. Entonces, la alcaldesa, Teófila Martínez, cifró en 5.000 millones la deuda municipal y aseguró que al cierre del ejercicio del 2000 el déficit se reduciría en 800 millones

Ninguna de estas previsiones se ha cumplido, según la liquidación del presupuesto elaborada por la intervención municipal. La deuda asciende a 13.175 millones de pesetas y el déficit es de 3.751 millones. A esta cifra, el PSOE suma entre 2.500 y 3.000 millones correspondientes a los derechos pendientes de cobro de difícil o imposible recaudación, que es un capítulo que debe añadirse al déficit de las corporaciones locales, según estableció la Cámara de Cuentas en 1997.

La intervención municipal dictamina en el informe que 'sería necesario y legalmente imprescindible la elaboración de un plan de saneamiento financiero que regule la situación de la corporación municipal desde el punto de vista de la absorción del remanente negativo de tesorería'. Esta es la principal conclusión de un informe que, según el portavoz del grupo municipal del PSOE, Juan Ortuño, demuestra que el PP ha conducido al consistorio gaditano a una 'preocupante y crítica' falta de liquidez para afrontar los pagos a los proveedores.

'Nos preocupa de manera particular el estrangulamiento al que se somete a la pequeña y mediana empresa gaditana, que son los principales acreedores del Ayuntamiento', dijo Ortuño, quien cifra en 6.000 millones el dinero en efectivo que necesita el municipio para asumir los pagos más inmediatos.

Inversiones

Asimismo, la intervención alerta sobre el bajo grado de ejecución presupuestaria en el capítulo de inversiones, que ascendía en ese ejercicio a 2.300 millones de pesetas. Según el informe, sólo se ejecutó el 40 % de esta cantidad, con lo que se dejaron de invertir más de 1.300 millones. En cuanto a los ingresos corrientes, se liquidó el 74 % de los presupuestado.

Ortuño responsabilizó de esta situación a Teófila Martínez, pese a que, según dijo el edil, 'ha vendido prácticamente todo el patrimonio municipal, de aplicar una elevada presión fiscal a los gaditanos con los impuestos más caros de todas las capitales andaluzas, y de trasladar parte de la deuda consistorial a la empresa municipal Aguas de Cádiz'.

'Martínez ha fracasado con su política económica, no sólo no ha saneado las cuentas locales sino que ha empeorado la ya por sí delicada situación de las arcas municipales', opinó el concejal del PSOE.

Asimismo, el portavoz socialista emplazó al gobierno del PP a no 'inflar' los presupuestos del 2002 para 'evitar' un aumento de la deuda y del déficit real. También instó a Martínez a que 'restrinja las partidas superfluas', y se gaste 'con rigor y en lo realmente necesario', como el fomento del empleo, el desarrollo económico, los equipamientos, las zonas verdes y las viviendas.