Pastrana: "Las FARC ya no son unos 'Robin Hood' en Europa"

El expresidente de Colombia Andrés Pastrana (1998-2002) hizo valer ayer en Madrid su legado al frente del país, así como la labor que viene realizando el actual presidente, Juan Manuel Santos. Medidas como el Plan Colombia (que él y Bill Clinton firmaron en 1999 y que articula la ayuda de EE UU en la lucha contra el narcotráfico), el fortalecimiento del Ejército y la inclusión de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en las listas internacionales de organizaciones terroristas fueron "claves", afirma Pastrana, para los avances que ha registrado su país en materia de seguridad. "Todas estas medidas han hecho que hoy día [las FARC] dejen de ser vistas como unos Robin Hood y que progresivamente se queden sin espacios".

Para Pastrana, las promesas de las FARC de liberar a varios secuestrados son una "farsa". La guerrilla, afirma, "no se lo está tomando en serio". El proceso se vio interrumpido el pasado domingo después de que el grupo armado incumpliera su compromiso de entregar a otros dos rehenes.

El expresidente se muestra muy crítico con la actitud de Estados Unidos hacia Colombia. "No entiendo la posición del Gobierno norteamericano, las preferencias arancelarias han vencido y seguimos sin noticias del Tratado de Libre Comercio", afirma, visiblemente enojado.

Pastrana participó ayer en un encuentro organizado por el Club de Madrid, foro de promoción de la democracia que agrupa a 79 expresidentes, y al que también acudieron el colombiano Belisario Betancur, el mexicano Ernesto Zedillo y el uruguayo Julio María Sanguinetti.

Los cuatro expresidentes analizaron la situación que atraviesan sus países y la región desde tres ángulos diferentes: la estabilidad política, la seguridad jurídica y el comportamiento de Latinoamérica ante la crisis económica sufrida por Europa y EE UU. Todos coincidieron en que, si bien la región ha mostrado una gran resistencia frente a la crisis y ha mantenido la prudencia macroeconómica, aún persisten serios desafíos para el desarrollo, como la presencia del crimen organizado y la inseguridad jurídica.