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Hacienda detecta gastos sin justificar en la cúpula de RTVE en el mandato de Pérez Tornero

Una auditoría sobre la gestión de 2021 reclama a la corporación pública un modelo de programación más eficiente

José Manuel Pérez Tornero, durante la presentación de la temporada 2022-23 de RTVE, en septiembre pasado.
José Manuel Pérez Tornero, durante la presentación de la temporada 2022-23 de RTVE, en septiembre pasado.RAUL TERREL (RAUL TERREL)

El Ministerio de Hacienda, a través de la Intervención General de la Administración del Estado (IGAE), ha detectado una “debilidad de control interno” en las justificaciones de los gastos realizados en 2021 por el entonces presidente de RTVE, José Manuel Pérez Tornero, y siete altos directivos. En un extenso documento de auditoría, el organismo evalúa la gestión económica de la corporación en el mencionado ejercicio, con especial atención a la producción de programas y a los criterios de emisión, y concluye que necesita un modelo de programación más eficiente.

La IGAE ha realizado un estudio específico de los gastos individuales liquidados durante 2021 por el entonces presidente y el resto de la cúpula, como almuerzos, cenas, desayunos de trabajo, taxis, combustible, billetes de tren y avión. El principal hallazgo es que el 64,9% del importe total (12.108 de 18.671 euros, mayoritariamente destinados a restaurantes) no ha sido suficientemente justificado, por no especificar el motivo del gasto, ni el cargo y organización de la persona con la que se produjo la reunión.

También reprocha a RTVE que incumpla en este apartado de gastos de la alta dirección “las recomendaciones de austeridad implantadas en el sector público”, con almuerzos de más de 50 euros por comensal, con “productos de alta calidad” y, en algunos casos, “elevados cargos de bebidas alcohólicas”. RTVE alega en el informe que esa información es interna por motivos de confidencialidad. Los auditores no consideran que sea un motivo suficiente. “No entendemos que exista mayor confidencialidad en un restaurante público que en un despacho de la corporación o en el comedor de directivos” de Prado del Rey.

Las comidas son con consejeros de RTVE, funcionarios o cargos políticos. También con otros directivos o personal de la corporación y que, según el informe, podrían haberse realizado en las oficinas, lo que “disminuiría notablemente el coste”.

Los expertos de la IGAE también detectan falta de controles en el uso de los vehículos con conductor que se solicitan a través da la intranet de RTVE, y que no siempre están justificados. No solo en la cúpula, sino de forma más general. “Existe una falta de rigor a la hora de cumplimentar las peticiones del servicio”, afirman.

Al margen de este análisis desmenuzado de los gastos del equipo de alta dirección de Pérez Tornero, que dimitió del cargo en septiembre pasado, el informe evalúa el comportamiento económico de la corporación, una empresa que en 2021 gestionó un presupuesto de 1.181 millones de euros y una plantilla de 6.441 personas, de los cuales 174 son directivos y 952 son trabajadores temporales, interinos, eventuales o en prácticas.

Producción propia

El informe aborda en profundidad los costes de producción de los contenidos y percibe que en los programas de producción propia en los que intervienen productoras, no siempre se alcanzan los objetivos de audiencia que se incluyen en los contratos: “En algunos casos, las audiencias están por debajo de lo que cabría esperar en función de sus costes”.

El documento destaca que TVE no cumple los criterios establecidos en la ley. Las horas de producción interna de programas informativos e institucionales se sitúan en el 96%, mientras que la norma fija ese objetivo en el 100%. Las horas de producción interna de los programas de entretenimiento y variedades suponen el 48,1%, por debajo del 55% marcado como objetivo. Sí se cumple el porcentaje de contenidos educativos, divulgativos y de actualidad (68,9% frente al 60% exigido).

El informe aborda en profundidad los costes de producción de los contenidos y percibe que en los programas de producción propia en los que intervienen productoras, no siempre se alcanzan los objetivos de audiencia que se incluyen en los contratos. “En algunos casos, las audiencias están por debajo de lo que cabría esperar en función de sus costes”, especifica. Recomienda la emisión de los largometrajes con costes elevados en La 1 y en horarios de mayor audiencia y critica que se emitan películas de estreno el mismo día y a la misma hora en las dos cadenas (La 1 y La 2). Entre los títulos que obtienen las audiencias más bajas destaca Emoji, la película, que presenta uno de los costes más elevados, más de 1,7 millones de euros y obtiene apenas un 4,3% de audiencia.

Globalmente, en 2021 se produce un incremento de los costes totales de producción de programas, que pasan de 241 millones de euros a 255, lo que supone un incremento del 5,6% respecto al año anterior. Los títulos con un coste por minuto más elevado se emiten, generalmente, en la franja de máxima audiencia de La 1. Varían desde los 3.121 euros por minuto de MasterChef Senior (temporada 9), a los 11.981 de Fuerza de paz, serie de ficción que aún no se ha emitido. Si se atiende al precio por capítulo, el coste más elevado corresponde igualmente a Fuerza de paz (718.837 euros), seguida de Cuéntame cómo pasó (634.145), MasterChef Junior (618.044), Estoy vivo (609.849) y Hit (588.631). En algunas producciones, entre ellas Cuéntame, el informe observa cómo de una temporada a otra se ha incrementado el coste mientras que se ha reducido la duración de los capítulos.

La auditoria pone de manifiesto que las diferencias de coste no quedan siempre reflejadas en las audiencias conseguidas y especifica que de los siete programas analizados con un coste por minuto superior a más de 5.000 euros, solo en uno de ellos se alcanza la cuota de audiencia de referencia marcada en el contrato. Las diferencias entre la audiencia prevista en la memoria y la real es a veces abismal. Cuéntame cómo pasó preveía alcanzar un 18% pero obtuvo un 11,1%, Dos vidas se marcó un 9,8% y registró un 6,6% y Prodigios contemplaba un 12% cuando en realidad obtuvo un 8,1%. Fuera del horario de máxima audiencia, solo dos de los 10 programas analizados alcanzan el share objetivo marcado en el contrato: Acacias 38 y Aquí la Tierra.

A la hora de evaluar las audiencias, el informe remarca que La 1 se mantiene como la tercera cadena generalista, “pero con los resultados más bajos de audiencia de los obtenidos en toda la serie histórica”. En 2021 registró un 8,8% de cuota de pantalla, frente al 14,9% de Telecinco y el 13,8 de Antena 3. El documento destaca que La 1, al igual que ocurrió en 2020, no lidera ninguno de los meses del año, siendo tercera opción en todos ellos tras las dos cadenas privadas.

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