El Congreso apoya la idoneidad de Carmen Calvo para presidir el Consejo de Estado
PP, Vox UPN niegan que la exvicepresidenta del Gobierno tenga “prestigio jurídico”, mientras los independentistas guardan silencio en el debate pero la respaldan en la votación, que se ha saldado por 19 votos a favor y 18 en contra
La exvicepresidenta del Gobierno Carmen Calvo ha obtenido el informe favorable del Congreso sobre su idoneidad para asumir la presidencia del Consejo de Estado por 19 votos a 18, tras un tenso debate en el que el PP, Vox y UPN cuestionaron que cumpla con el requisito de contar con “acreditado prestigio” para asumirlo. Los portavoces de ambos partidos tiraron primero por elevación y acusaron al presidente del Gobierno de “colonizar” las instituciones, nombrando a sus estrechos colaboradores para ocupar puestos de relevancia jurídica, primando los criterios de afinidad ideológica. Calvo, a su vez, argumentó que la experiencia política es esencial para ejercer una responsabilidad como la de la presidencia del más alto órgano consultivo del Gobierno y subrayó la subjetividad que siempre acompaña el juicio sobre el prestigio de cualquier persona. “El reconocido prestigio —afirmó— seguirá siendo un concepto jurídico indeterminado”. El informe aprobado por el Congreso es preceptivo, pero no vinculante, si bien perder la votación siempre tiene peso político y es una mancha. Los independentistas han acabado votándolo a favor, pese a sus reticencias con respecto a Calvo.
Carlos Flores (Vox) y Carmen Navarro (PP) sacaron a colación las actas del Pleno del Senado para citar una intervención de Carmen Calvo en la que se oponía a considerar la posible amnistía a los líderes del procés, por supuesta falta de encaje constitucional. Carmen Calvo replicó que lo que se le exigirá como presidenta del Consejo de Estado es actuar “con neutralidad”, no carecer de opiniones personales. ”Ponemos en duda —dijo a su vez Flores— su credibilidad, porque recordamos como en abril de 2021, siendo vicepresidenta primera, respondió a un senador independentista que una ley de amnistía no tenía cabida en el sistema constitucional ni en el estado de derecho de España, sino tampoco en el de ningún otro país europeo, aunque ahora ha intentado justificarla en una emisora de radio, diciendo todo lo contrario a lo que sostuvo en el Senado”.
Las opiniones de Calvo sobre la ley de amnistía fueron en parte la razón de que Junts, ERC, PNV y Bildu no hicieran uso de la palabra en la sesión de la Comisión Constitucional del Congreso, aunque sí apoyaron con su voto el dictamen favorable a la idoneidad de Carmen Calvo, junto al PSOE y Sumar. Fuentes de los partidos independentistas indicaron por una parte que quisieron mostrar sus reservas con los criterios de Calvo en algunas materias —no sólo la amnistía, sino también en determinados puntos de su discurso feminista “clásico”—, pero que al mismo tiempo no deseaban dejar de respaldar una propuesta de nombramiento que procede de la presidencia del Gobierno. En las mismas fuentes se sugirió que el voto positivo es, en el fondo, una buena señal en cuanto a la continuidad de los acuerdos con el Ejecutivo, empezando por el que ha de cerrarse antes del próximo día 7 de marzo para la aprobación de la ley de amnistía en el Congreso.
Sumar también criticó las posiciones de Carmen Calvo sobre la ley Trans, aunque sin cuestionar su idoneidad para el cargo. Su portavoz, Esther Gil, hizo una cerrada defensa de los derechos de este colectivo, abogando por “combatir la transfobia”. Carlos Flores (Vox) y Carmen Navarro (PP) se extendieron, en cambio, en agradecimientos al Supremo por haber permitido que la asociación Hay Derecho dirigiera su combate en otra dirección, el de afinar su doctrina sobre el concepto de “prestigio jurídico” para negárselo a la antecesora de Calvo, la exministra de Trabajo Magdalena Valerio. Esa sentencia del Supremo será impugnada ante el Constitucional por la vía de recursos de amparo que presentarán tanto la Abogacía del Estado como la propia Valerio. Flores y Navarro, por otra parte, expusieron con cierto detalle el currículum académico de Carmen Calvo para llegar a la conclusión de que no demostraba su “prestigio” ante la comunidad jurídica, por su larga dedicación a la política, en detrimento de sus publicaciones, dirección de tesis doctorales o contribuciones al desarrollo de la doctrina constitucional.
La réplica de Calvo para Flores fue atribuirle un ideario jurídico contrario a la consideración de género por haber criticado, por ejemplo, el tipo de publicaciones en que colaboró como profesora de Derecho Constitucional, que según el diputado de Vox no fue ninguna de las de mayor predicamento en círculos académicos. Y a la diputada Navarro le reprochó Calvo que hubiera recurrido a alusiones a las detenciones relacionadas con el caso Koldo, relacionado con una nueva trama de mascarillas durante la pandemia, atribuyéndole la pertenencia a un Gobierno contaminado por estas investigaciones. Calvo replicó a la portavoz popular que recurriera al “soniquete de una simple sesión de control” con el fin de utilizar lo que dijo de una hipotética ley de amnistía con el fin de hacer una “faena de aliño” en su discurso de oposición.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.