El Gobierno catalán retrasa al curso que viene la ayuda de 100 euros por hijo escolarizado que anunció en su plan contra la inflación

El Gobierno catalán ha reconocido este miércoles que una de las medidas principales de su plan de choque para hacer frente a la inflación tendrá que retrasarse. El pasado mes de septiembre, el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, anunció a bombo y platillo un paquete de iniciativas por valor de 300 millones para combatir el alza de precios, de los cuales 100 millones se destinarían a ayudas de 100 euros por hijo escolarizado. La idea era que este dinero llegase en forma de deducción del IRPF en la declaración de la renta, pero ya entonces surgieron dudas sobre su aplicación, porque precisamente las familias que más necesitan estas ayudas, las más vulnerables, no suelen hacer la declaración de la renta al no estar obligadas por los bajos ingresos que tienen. Este miércoles, en la sesión de control al Govern en el parlamento catalán, la consejera de Economía, Natàlia Mas, ha reconocido que este sistema no funcionará y que están trabajando en uno nuevo para otorgar las ayudas de forma directa en septiembre, es decir, para el próximo curso y un año después de que Aragonès anunciara la medida.

El anuncio del plan de choque se hizo en plena negociación de los Presupuestos y, como medida de presión para lograr apoyos, el president dejó claro estas medidas peligraban si no se aprobaban las cuentas —como finalmente se hizo, en febrero, gracias al acuerdo con el PSC y los comunes—. Este miércoles el diputado de Junts Jordi Munell ha preguntado al consejero de Educación, Josep González-Cambray, por estas ayudas, pero ha sido Mas la que ha contestado. “Es una medida en la que estamos trabajando la consejería de Economía y la de Educación conjuntamente. Puedo confirmarle que estas ayudas se darán, para estar al lado de las familias en unos momentos muy complejos, y que estas ayudas llegarán al inicio del curso que viene”, ha explicado Mas, que ha dado detalles sobre el por qué de este retraso: “Inicialmente, la manera más rápida de hacerlo era una deducción en la declaración de la renta, pero que fuese más rápido no significa que fuese lo mejor, porque este sistema tenía el problema de que dejaba fuera precisamente a todas las familias más vulnerables, que justamente no hacen la declaración de la renta”. “Por este motivo, lo hemos repensado y hemos optado por otro sistema, del que daremos más detalles en breve. Estará disponible a principios del curso que viene, que es cuando se concentra el gasto en material escolar”, ha añadido.

Las ayudas estaban pensadas para los alumnos entre los cursos de Infantil 3 y cuarto de secundaria, y habrían llegado en junio, cuando se hace la declaración de la renta. Aunque el Govern no detalló qué horquilla de ingresos utilizaría para seleccionar las familias a las que llegaría la ayuda, al tratarse de 100 millones y 100 euros por hijo, podía llegar a beneficiar a un millón de alumnos, cubriendo la totalidad de los que están escolarizados en estos cursos, incluidos los de la escuela concertada. Llevar a cabo esta medida con el sistema de la declaración de la renta podía dejar fuera precisamente a las más vulnerables, y por eso se trabaja en un sistema de ayudas directas. Un portavoz del departamento de Economía explica que esta partida de 100 millones está “contemplada” en los Presupuestos de este año, y que estas ayudas se darán de forma directa con un sistema que asegure que el dinero se usará para sufragar material escolar. El Govern no aclara si los alumnos que ahora cursan cuarto de secundaria, que en el momento del anuncio eran beneficiarios de la ayuda pero que en septiembre que viene ya no lo serán, recibirán también los 100 euros de forma retroactiva.

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