La Generalitat valenciana reduce por decreto el límite para construir hoteles en la costa

La Generalitat Valenciana, que gobierna PP y Vox, ha hecho saltar todas las alarmas en los grupos de la oposición de PSPV-PSOE y Compromís, porque a través de un decreto ley que entra en vigor este jueves permite construir hoteles en primera línea de la costa valenciana más cerca de los 500 metros que establecía la normativa desde 2018. El Plan Simplifica introduce un cambio que permite el uso terciario hotelero del suelo a partir de los 100 metros desde la línea de playa con algunas condiciones, según el contenido del decreto que publica este miércoles el Diari Oficial de la Generalitat Valenciana (DOGV).

El texto dice literalmente: “En los suelos no urbanizables de litoral se permitirán usos terciarios, públicos o privados, vinculados a la acampada, la vida al aire libre o a los deportes y actividades náuticas. Los terciarios hoteleros no podrán emplazarse a distancia inferior a los 100 metros medidos en proyección horizontal desde el límite interior de la ribera del mar tierra adentro y habrán de ajustarse a las exigencias de la legislación sectorial en materia de costas y del litoral y a las determinaciones que resulten del planeamiento territorial y urbanístico”. La mención a los 100 metros ha sorprendido especialmente porque en el borrador del anteproyecto de ley de protección del litoral, presentado hace dos meses por el Gobierno presidido por Carlos Mazón, del PP, se indica que el límite será de 200 metros.

Tras la polémica y la confusión generadas por el decreto y su redacción, el secretario autonómico de Presidencia, Cayetano García, ha salido a última hora de la tarde para asegurar que “nadie va a poder edificar ningún hotel a 100 metros de la costa, en ningún caso y bajo ningún concepto”. “Los hoteles se podrán construir a 200 metros de la costa como muy cerca. Los usos que se prevén entre 100 y 200 metros son construcciones desmontables”, ha señalado. Fuentes de la Consejería de Medio Ambiente han indicado que el decreto ley se ajusta a la normativa estatal “que regula la servidumbre de protección de hasta 100 metros del deslinde marítimo terrestre”, competencia del Gobierno central. Y concluye que el anteproyecto de ley del litoral recogerá estos parámetros, atendiendo a los supuestos prácticos y la orografía de la Comunidad Valenciana, en relación a las carreteras o a los ejes viarios que la estructuran, que requieren disminuir la franja de los 200 a los 100 metros, tal como se ha hecho en el decreto de simplificación”.

El decreto modifica la Ley de ordenación del territorio, urbanismo y paisaje (Lotup) y “enmascara”, según denuncian los socialistas, la reducción de la distancia a la que se permite construir en el litoral “de los 500 metros actuales establecidos por el plan de protección de la costa, el Pativel, a 100 metros”. El Pativel, que ahora queda modificado, lo aprobó en 2018 el Consell de izquierdas para proteger de la construcción la primera línea de costa. La exconsejera socialista de Territorio, María José Salvador, se pregunta por qué tiene tanta prisa el Consell de reducir la protección de la costa que ni espera a aprobar su propia ley.

La oposición ya criticó con dureza ese anteproyecto por rebajar a 200 metros de la ribera del mar los usos terciarios hoteleros en suelo no urbanizable y por permitir nuevos residenciales a partir de los 500 metros. También abre la vía a las actividades recreativas en suelos no urbanizables del litoral y a la consolidación de los poblados marítimos ilegales en el dominio marítimo-terrestre.

“El PP acaba con el Pativel por la puerta de atrás y permite bajo el paraguas de la urgente y extraordinaria necesidad la construcción de hoteles a partir de los 100 metros de la costa. Es un carpetazo a las políticas de protección y ordenación del Botànic, una vuelta al urbanismo salvaje y está en las antípodas de la lucha contra el cambio climático y la sostenibilidad”, ha manifestado la diputada socialista y exconsejera de Territorio, María José Salvador. “El PP está volviendo al urbanismo depredador de siempre”, ha denunciado el portavoz socialista en las Cortes Valencianas, José Muñoz.

Los socialistas estudiarán “con responsabilidad y sosiego” el decreto de simplificación administrativa, al estar “convencidos de que oculta muchas más cosas. Este decreto “ómnibus” esconde “otro tipo de reformas” y “las políticas más oscuras del PP” al haberse “aprobado por la vía de urgencia”. “Vamos a combatirlo”, ha aseverado Muñoz, quien ha reprochado a la portavoz y consejera de Hacienda, Ruth Merino, que en el pleno de este martes fuera “incapaz de poner ejemplos” sobre los ámbitos de simplificación administrativa.

El síndic de Compromís, Joan Baldoví, ha denunciado que “es una auténtica barbaridad que PP y Vox aprueben un decreto ley de 123 artículos”. “Es una auténtica ley de acompañamiento [a los presupuestos de la Generalitat] pero sin enmiendas, sin participación ciudadana, sin voto del Parlamento”, ha señalado. Tras un “primer estudio” del texto, ha asegurado que “no es un decreto de simplificación”, sino “de destrucción del territorio y de los controles contra la corrupción”, así como “un paso más que nos hace volver a las peores épocas del PP más corrupto”.