Croquetas picantes de boniato y queso
Nuestra última propuesta croquetera tiene una base de boniato, un toque de chile y queso para dar untuosidad. Vienen con un consejo de regalo para formarlas sin acabar pringado de pan rallado hasta las cejas.
Que en El Comidista somos muy croquetistas es bien sabido por todos los que formáis parte de ésta, nuestra gran comunidad. Ya sabrás que la croqueta es una receta de aprovechamiento y, si no lo sabes, te lo recordamos: la bechamel lo acepta casi todo y meterle ya sea jamón, restos de pollo asado o puchero, darle forma más o menos redondeada, rebozarla y freírla es uno de los mejores inventos culinarios para recuperar sobras. Existen otras formas de hacer croquetas. Nuestras Comidistas Mireia Font y Miriam García nos deleitaron con unos korokke, una receta de croqueta japonesa que se hace con patata en lugar de bechamel, y unas croquetas de patata y setas, respectivamente. Hoy añadimos a la lista de croquetas comidistas éstas de boniato y queso, con un suave toque picante.
Si quieres que te queden unas croquetas bien sabrosas, es interesante utilizar un queso que funda para contribuir a la cremosidad de la masa. Queda bien mozzarella -las bolitas pequeñas me han funcionado mejor, diría que porque sueltan menos agua al calentarse, siempre puedes dejar la bola abierta sobre un colador durante un buen rato-, queso cheddar, gruyère o camembert. He probado también feta y, aunque no se deshace, sí que queda algo más suave y le porta un punto salado que contrasta muy ricamente con el dulzor del boniato y el picante del chile.
Para que la masa sea fácil de manejar y la croqueta nos quede muy cremosa una vez frita, le he puesto dos hojas de gelatina. La puedes obviar si quieres hacer la receta apta para vegetarianos, pues la gelatina es un ingrediente de origen animal, pero será importante que la masa esté bien fría para que la puedas manejar bien. Aún así, os recomiendo que forméis las croquetas haciendo quenelles con dos cucharas: aunque es necesario practicar un poco al principio para que salgan bien, resulta más sencillo manejar la masa y es más limpio. El rebozado, en este caso, lo hago con harina, huevo y pan rallado. La harina hace que la quenelle, que es bastante frágil, no se nos pegue en las manos en su camino de convertirse en croqueta a la hora de pasarla al huevo. En cualquier caso, tienes explicado todo el proceso de rebozar las croquetas en la receta: que las disfrutes.
Ingredientes
Para unas 22-24 croquetas
- 800 g de boniatos
- 1 cucharada sopera de aceite de oliva
- 2 hojas de gelatina
- 100 ml de nata para montar (con el 35% de materia grasa)
- 20 g de mantequilla
- ½ cucharadita de postre de chile en polvo
- Sal al gusto
- 30 g de harina
- 100 g de queso que funda (mozzarella, cheddar)
- 2 huevos camperos
- 100 g de pan rallado
- Aceite de oliva abundante para freír
- Escamas de sal al gusto
Instrucciones
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