El miedo de los chilenos a sufrir un delito alcanza su máximo registro histórico
La Fundación Paz Ciudadana entrega los resultados de su índice de percepción ciudadana sobre la seguridad pública que muestra que los habitantes de Santiago, las mujeres y los más pobres son los que tienen mayor temor
La Fundación Paz Ciudadana, una organización no gubernamental que lleva más de dos décadas empujando el desarrollo de políticas públicas en contra de la delincuencia en Chile, ha entregado este jueves su índice de percepción ciudadana sobre la situación de la seguridad pública en el país sudamericano que muestra que el miedo de la población a sufrir un delito alcanzó su máximo registro histórico. La sensación de temor, según la investigación, afecta principalmente a las mujeres y a los más pobres.
El estudio se realizó entre el 14 de agosto y el 12 de septiembre a una muestra aleatoria de 1.863 personas —hombres y mujeres mayores de 18 años— en las principales ciudades del país. Su principal objetivo fue “obtener información sobre la victimización, la reacción frente al delito y la percepción de temor de la población”.
Entre sus conclusiones, el índice muestra que la proporción de personas con alto temor a sufrir un delito alcanza el 30,5%, el número máximo desde el año 2000, cuando Paz Ciudadana puso en marcha el análisis. En 2022 este parámetro alcanzaba un 28%, marca que ya era la más alta en la historia del índice, que tuvo su mínimo en 2018, cuando el temor extremo contra la delincuencia alcanzó solo un 10,4%.
En los datos desagregados, la zona con mayor miedo frente a la delincuencia es la capital Santiago, con un 33,1%. Las cifras también son mayores entre las mujeres, con un 35,4%; y en los consultados que pertenecen a los sectores económicos bajos, donde se llega a un 34,6%.
El índice también midió el temor de acuerdo a algunas situaciones específicas. Por ejemplo, un 65% de los entrevistados ha reforzado las medidas de seguridad en sus casas, mientras que un 73% ha dejado de salir de su casa a ciertas horas del día. Además, un 72% ha dejado de ir a ciertos lugares; un 73% renunció a usar artículos de valor en público; y un 69% se ha organizado con sus vecinos para resguardarse de los delincuentes.
Daniel Johnson, director ejecutivo de Paz Ciudadana, ha declarado que Chile está viviendo “tiempos complejos” en materia de seguridad pública, lo que se ha reflejado en un aumento de las restricciones autoimpuestas por la población para su propio resguardo. “Tenemos un altísimo nivel de cambios de comportamiento de la ciudadanía para evitar ser víctima de delitos, lo que significa restricciones en muchos aspectos, y lamentablemente, tenemos una evaluación sumamente crítica de las instituciones que tienen responsabilidad en materia de seguridad y justicia en Chile”, dijo este jueves.
El incremento de la victimización
El índice de victimización, en donde se consulta si el entrevistado o una persona de su entorno ha sido víctima de algún delito, también ha experimentado un aumento. Es una tendencia al alza que se arrastra desde hace tres años, cuando finalizaron los confinamientos más rígidos por la pandemia de la covid.
En las cifras detalladas, un 36% de los consultados afirmaron que en su hogar hubo alguna persona afectada con un robo o un intento de robo, lo que representa un aumento de 3,9 puntos en comparación a 2022. Un 69% señaló que el delito fue consumado y un 31% que se trató de un intento de robo. Un 73% dijo que los robos habían sido violentos y un 27% no violento. La mayoría de los delitos ocurrieron fuera del hogar (90%). Las familias más perjudicadas con esta acción se concentran en Santiago (39,6%) y pertenecen a los sectores socioeconómicos medios (38,3%).
Las características de los robos también fueron parte de la revisión estadística. Por ejemplo, un 73% de los hogares dio cuenta que alguno de sus integrantes fue víctima de un robo consumado o un intento de robo con características violentas en los últimos seis meses. El 90% de los consultados, además, manifestó que estos hechos se registraron fuera de su vivienda. A esto se suma la revictimización —la ocurrencia del delito más de una vez— la que alcanzó un 15%.
Junto con evaluar la percepción sobre los delitos y el temor, el trabajo de Paz Ciudadana midió el nivel de confianza que tienen los chilenos sobre las instituciones encargadas de la seguridad pública: Carabineros alcanza un 54,6% de respaldo, mientras que la Policía de Investigaciones (PDI) se encumbra en el 64,8%. En cuanto al desempeño institucional —de una escala del 1 al 7—, la PDI alcanza una calificación de 4,7 y Carabineros llega al 4,4. Entre los peores calificados están los diputados y senadores (2,2), los fiscales del Ministerio Público (2,7) y la Defensoría Penal Pública (2,8).
Eduardo Vergara, el subsecretario de Prevención del Delito del Gobierno de Gabriel Boric, ha comentado estas cifras y ha explicado que desde el Ejecutivo tratan la victimización y la sensación temor ciudadano frente a la delincuencia “con la misma importancia y relevancia”. “Por eso, las acciones que hemos llevado adelante no solo apuntan a bajar la criminalidad, sino que a aumentar la presencia estatal. El presidente de la República ha entregado ahora un Presupuesto que hace crecer en un 5,7% el presupuesto de la nación en seguridad”, ha dicho Vergara.
Las autoridades chilenas han concentrado su accionar en enfrentar, principalmente, la propagación del crimen organizado. Durante los últimos años las labores del Gobierno y de la Justicia se intensificaron en la desarticulación de agrupaciones criminales de origen extranjero como el Tren de Aragua, procedente de Venezuela.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.