Egipto rechaza el plan de paz israelí para el Sinaí

Egipto ha rechazado el plan de paz propuesto por los israelíes para la península del Sinaí, bajo el argumento de que tal acuerdo viola la soberanía egipcia y «la naturaleza de la paz misma».En unas declaraciones que han sido televisadas a todo el país, el ministro de la Guerra, general Mohamed Gamassi, ha dicho que el plan presentado en las conversaciones celebradas en El Cairo a principios de esta semana fue rechazado, principalmente, porque implica la continuación de la presencia israelí en suelo egipcio.

Después de afirmar que el ministro de Defensa israelí, Ezer Weizman, insistió en seguir reteniendo veinte asentamientos fronterizos, así como tres aeropuertos considerados de importancia clave, Gamassi declaró: «Discutimos el plan con objetividad y no consiguió ser aceptable para los egipcios. El problema principal era la cuestión de los asentamientos y los aeropuertos. Gamassi afirmó en sus declaraciones a la televisión que la propuesta israelí «viola la soberanía egipcia e, incluso, la propia naturaleza de la paz». Sin embargo, Gamassi reiteró las declaraciones que hizo después del aplazamiento de sus conversaciones estancadas con Ezer Weizman, el viernes, afirmando que no había perdido la esperanza de que todavía pudiera negociarse un acuerdo.

En Jerusalén, aun a falta de reacción oficial a las pesimistas declaraciones del presidente Anuar el Sadat a la revista Octubre y a las duras declaraciones del general Gamassi, los observadores perciben la preocupación que la aparente nueva situación podría crear con vistas al progreso de las negociaciones de paz.

El general Gamassi ha afirmado que han tratado, en más de una ocasión, el tema de los asentamientos y de los aeropuertos «y hasta este momento no hemos llegado a encontrar la forma de adoptar una decisión definitiva. Con persistencia, conversaciones continuadas y un debate objetivo, podremos superar los numerosos problemas a que se enfrentan una y otra partes».

Gamassi ha dicho que Egipto presentó contraofertas en las conversaciones de El Cairo, e indicó que ambas partes estaban de acuerdo en dividir el Sinaí en zonas, unas desmilitarizadas, otras con la presencia de fuerzas de la ONU solamente y otras con la presencia de fuerzas egipcias.

Añadió que existe una contradicción entre la buena voluntad, en principio, de Israel de retirarse del Siriaí y su insistencia en mantener sus asentamientos fronterizos, atribuyéndola a «factores sicológicos acumulados durante mucho tiempo».