Los "nueve" tratan de coordinar la política exterior europea ante la crisis internacional

Los nueve buscan esforzadamente algún mecanismo que permita coordinar la política exterior europea en caso de crisis internacional repentina, como la del Afganistán. Sin embargo, los ministros de Asuntos Exteriores de los países miembros de la CEE, reunidos ayer en Bruselas, no fueron capaces de concretar qué fórmula podría adoptarse.Aunque a la hora de transmitir esta crónica el Consejo continuaba reunido, en los pasillos del edificio comunitario en el que se celebra se afirmaba que los nueve han aplazado hasta su próxima reunión en Roma, el día 19 de este mes, la mayoría de las decisiones importantes que tenían en cartera.

En efecto, los ministros de Asuntos Exteriores estudiaron los preparativos de la Conferencia de Seguridad y Cooperación Europea, de Madrid, pero no se pronunciaron tajantemente, sobre un posible aplazamiento. Estiman que son válidos los trabajos reafizados hasta el momento para la determinación de los temas a tratar, pero no excluyen que en la reunión que celebren en Roma puedan examinar más ampliamente la cuestión, «con una valoración política del conjunto».

En Roma, los nueve deberán también intentar, por última vez, adoptar isna postura común respecto a los Juegos Olímpicos de Moscú y la propuesta norteamericana de boicot. Ayer, en Bruselas, sólo alemanes y británícos manifestaron públicamente su actitud al respecto: hicieron un llamamiento a la Unión Soviética para que cree «las condiciones necesarias para que los atletas puedan ir a la Olimpiada». En cuanto a la restricción de los créditos hacia la Unión Soviética y otros países socialistas, los nueve decidieron volver a estudiar las propuestas en una reunión que celebrarán en París.

Paralelamente, el Consejo de Ministros de Asuntos Exteriores de los nueve aprobó ayer un comunicado anunciando la reanudación del diálogo CEE-Turquía, interrumpido durante el Gobierno de Ecevit. Los comunitarios subrayan la importancia política que atribuyen a este reinicio de las relaciones.

La delegación turca no se mostraba excesivamente satisfecha con el compromiso contraído por la Comunidad de «proseguir los esfuerzos tanto bilaterales como multilaterales en favor de Turquía. Hubieran deseado una relación más concreta de medidas comerciales y financieras, pero se han conformado con la promesa de adoptarlas rápidamente y, sobre todo -y esto interesa especialmente a España-, con la promesa de que la ampliación del Mercado Común no afectará a las relaciones turcocomunitarias y que ninguno de los protocolos de Ankara podrá ser modificado por este motivo.

La CEE no pierde tampoco de vista Yugoslavia: la enfermedad del mariscal Tito aconsejó echar por la borda todos los inconvenientes existentes hasta el momento para un acuerdo comercial en las condiciones solicitadas por los yugoslavos. Las negociaciones se han reiniciado y el comunicado conjunto no puede ser más optimista.

Reportaje sobre Afganistán en página 7