Para todos los gustos
Con respecto al divorcio que viene, quisiera hacer una consideración desde el punto de vista liberal y democrático: ¿quién puede negar a una pareja su derecho a contraer su matrimonio para siempre?Si el artículo 32 de la Constitución habla de la pluralidad de formas, ¿por qué en el proyecto se contempla, autoritariamente, una sola posibilidad: la del matrimonio legalmente disoluble? ¿Qué auténtico demócrata puede negar el derecho de contraer matrimonio para siempre?
Quizá alguien me diga: «Si el divorcio es libre, ¡que no acuda a él! ». Y es que no entienden que haya quienes deseen poner la indisolubilidad en el principio del camino que se emprende y no en el final; no en los efectos del contrato, sino en el contrato mismo, como una nota constitutiva y esencial.
Por tanto, en una sociedad pluralista y democrática como la nuestra, se debe dar en cuanto al contrato matrimonial las dos posibilidades, para que cada uno elija la que más le convenza./
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.