Más de 5.000 personas han acudido a ver el "Guernica" en el Casón del Buen Retiro

José Ruiz López, profesor de EGB, de 42 años, casado, con un hijo, fue el primer español que entró a ver el Guernica en la inauguración pública de la exposición de esta obra, celebrada el pasado domingo en el Casón del Buen Retiro, de Madrid, donde se hallan colgados el cuadro de Picasso y los 63 bocetos que le acompañan. Más de 5.000 personas acudieron entre el domingo y ayer a ver el famoso lienzo, que se inauguró el día del centenario de su autor, conmemorado en la capital de España, Málaga, Guernica, Barcelona y París con diversos actos.

Unas 5.300 personas, según cifras oficiales, acudieron a ver el cuadro en el que Picasso resumió dramáticamente la historia del bombardeo de Guernica en los días en que lleva abierto al público. El domingo, día de la inauguración, pasaron, ante la obra 3.300 personas, que en un 70% eran filatélicos, en busca del sello que, con su correspondiente tampón del día 25 de octubre, se ponía a la venta. La reventa de este sello alcanzó el 300% de su valor en las propias colas de la gente que esperaba entrar.El tiempo medio de espera para entrar a ver el Guernica ha sido de tres cuartos de hora, siendo el momento más bajo la hora de la comida, entre las dos y las tres de la tarde.

Se han vendido hasta ahora 2.000 carteles, al precio de cien pesetas cada uno, siendo preferido por el público aquel que reproduce el Guernica completo.

Se han vendido también trescientos catálogos, editados por el Ministerio de Cultura, al precio de ochocientas pesetas cada uno, y 150 bolsos al precio de doscientas pesetas cada uno.

El público ha aguardado en las colas con paciencia y buen humor, cosa que no se registraba ayer a las seis de la tarde, cuando un número bastante elevado de gente trataba de entrar al museo, que, como todos, se cierra a las cinco de la tarde, y que precisamente ayer se cerró a las cinco y media, debido a la cantidad de gente que había dentro.

El pitido de los sistemas de seguridad es permanente, dada la profusión de objetos de metal que lleva el público que pasa por él.

Miles de personas participaron durante la jornada del domingo en los actos organizados por el Ayuntamiento de Barcelona en conmemoración del centenario del nacimiento de Pablo Ruiz Picasso, informa Enric Canals. El principal y más vistoso de los actos -también el que contó con una mayor participación popular- fue el pasacalle que recorrió las principales arterias del centro y del casco antiguo de la ciudad. El principal motivo del pasacalle eran unas reproducciones de grandes muñecos de cartón representando personajes de la obra picassiana.

Desde aproximadamente las once de la mañana, decenas de muñecos -obra diseñada bajo la dirección del humorista y dibujante Guillem- danzaron incansablemente al son de chirimías y tambores. Desde el toro y el caballo del Guernica hasta el Arlequín, las diferentes meninas y el propio Picasso, convertido en ocasional cabezudo, se mezclaron con la gente que seguía el pasacalle.

Paralelamente, centenares de personas visitaban las instalaciones del Museo Picasso, en la calle de Montcada. En la fachada del museo, Mercé Sala, alcalde accidental de Barcelona, descubrió una placa conmemorativa del centenario del pintor.

También a lo largo de la mañana del domingo, la Banda Municipal, en la plaza del Rey, y la Orquesta Ciudad de Barcelona, en la de Sant Jaume, ofrecieron sendos conciertos, en cuyas composiciones primaban las obras de amigos y contemporáneos del pintor malagueño.

Los actos populares finalizaron a mediodía con la elevación de globos de papel con el dibujo de la popular paloma de la paz que pintara Picasso.

En relación con los actos organizados en Barcelona con motivo del centenario del nacimiento de Pablo Picasso, es de señalar la afluencia de público que registra la exposición Picasso y Barcelona, instalada en el Museo del Tinell.