Ceaucescu propone que Rumanía renueve su adhesión al Pacto de Varsovia

El presidente rumano, Nicolae Ceaucescu, presentó ayer en la inauguración del XIII Congreso del Partido Comunista de su país la propuesta de renovar el año próximo su adhesión al Pacto de Varsovia, cuando se cumplan los 30 años de existencia del pacto militar del bloque socialista, en el que Rumanía ha dado algunas muestras de no encontrarse muy a gusto. Ceaucescu dejó en claro que habría preferido que los dos bloques militares se hubieran disuelto y criticó las políticas norteamericana y soviética de instalar más misiles en Europa.

Desde la intervención en Checoslovaquia (agosto de 1968), que la URSS dirigió y Rumanía condenó, este país no participa en las maniobras del Pacto de Varsovia, excepto con oficiales de Estado Mayor. Fuentes autorizadas rumanas comentan en privado que preferirían la renovación de su pertenencia al Pacto de Varsovia cada cuatro o cinco años, en vez de los actuales períodos de un decenio.Rumanía significa para el Pacto de Varsovia lo que Grecia para la OTAN, un país que continúa en la alianza más por miedo a los cataclismos que provocaría su salida que por conveniencias nacionales. No por casualidad, el presidente rumano y el primer ministro socialista griego, Andreas Papandreu, colaboran estrechamente en el plan de desnuclearización de la estratégica península balcánica en la que conviven con turcos, yugoslavos, búlgaros y albaneses.

Pero, mientras que los extranjeros concentran su atención en las declaraciones internacionales del jefe del Estado rumano, la gente de la calle que hace cola ante las tiendas en busca de ciertos productos deficitarios, piensan en la crisis económica, los apagones y la carestía. Ceaucescu les prometía ayer más racionalización y menos inversiones faraónicas. A los artistas les recomendó seguir en el romanticismo revolucionario.

Ceaucescu persiste en su política de desarrollo a ultranza y saneamiento de una deuda exterior estimada en 8.000 millones de dólares, sin hacer concesiones al consumo de la población Rumania sigue siendo, junto con Polonia, el país de menor nivel de vida de los del Pacto de Varsovia Aunque el igualitarismo hace más soportable la escasez, la corrupción y los favoritismos la afean.

Demasiado trabajo

Los rumanos figuran entre los europeos que más trabajan, con una semana laboral de 46 horas, algo que este congreso podría mejorar con la recomendación de la semana de 44 horas. Ceaucescu prometió ayer que el horizonte de bienestar empezará a despejarse dentro de cinco años.Varios miembros de la familia Ceaucescu figuran en puestos prominentes. Su esposa, Elena, es presidenta del Consejo de Ciencia y Tecnología y es miembro del buró permanente del partido, cenáculo íntimo y supremo partido que encauza a los 400 miembros del comité central y a los tres millones y medio de miembros del partido. Su hijo, Nicu, es a sus 34 años de edad, miembro del comité central y ministro de la Juventud. Un paso más en la jerarquía podría convertirlo en candidato a la jefatura del partido y el Estado.

Sin duda Ceaucescu será reelegido el viernes máximo dirigente del país entre vítores y gritos de "Ceaucescu-paz". Se intentará esta vez, por todos los medios, que no se repita la bochornosa anécdota de hace cinco años, cuando un viejo comunista de 84 años de edad, Konstantín Pirvulesci, acusó a Ceaucescu, ante todos los delegados, de burlarse de la democracia.