El fiscal jefe de Valencia reitera que en el 'caso Naseiro' había indicios de cohecho

, El fiscal jefe del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana, Enrique Beltrán, afirmó ayer que las diligencias remitidas por el juez Luis Manglano al Tribunal Supremo sobre el llamado caso Naseiro tenían base suficiente para iniciar una causa penal por cohecho. De este modo, el fiscal Beltrán reiteró su posición respecto a este caso, en contraste con las afirmaciones realizadas en San Sebastián por el fiscal del Estado, Lepoldo Torres, quien mantuvo la hipótesis de que los implicados "hablaban de farol". Beltrán dijo que si hubiera contemplado esa posibilidad habría pedido el archivo de las actuaciones.

Por su parte, Torres se negó ayer a informar sobre el contenido de las diligencias solicitadas por la fiscalía al instructor del Tribunal Supremo sobre el caso Naseiro y alegó que previamente deben conocerlas las defensas, informa Julio Martínez Lázaro. Tampoco contestó sobre si el fiscal pedirá que el Tribunal Supremo dé curso al suplicatorio contra el diputado del PP Ángel Sanchis ni sobre el momento en que se pedirá que sean citados a declarar Manuel Fraga y José María Aznar.En cambio, Torres trató de matizar la información publicada ayer por este periódico respecto al mantenimiento por él en San Sebastián, durante el pasado In de semana, de la hipótesis según la cual los interlocutores del caso Naseiro "hablaran de farol", así como que por el momento no se han comprobado los indicios delictivos hallados por el juez Manglano y que no descarta "dentro de dos meses" la petición de so breseimiento (veáse EL PAÍS de ayer).

Reunión informal

Al detalle de que las opiniones del fiscal general se produjeron en conversaciones privadas, repetidamente mencionado por EL PAN ayer, Torres añadió que sus manifestaciones se produjeron "en una reunión absolutamente informal y distendida`. También confirmó que por el momento no hay nada decidido, ya que "están abiertas todas las hipótesis".

Por su parte, el fiscal Beltrán, tras reiterar la existencia de indicios de delito en el caso Naseiro, que actualmente conoce el Tribunal Supremo, declaró: "Desconozco la tramitación posterior del alto tribunal, pero las actuaciones que yo supervisé así lo evidenciaban", aseguró. El magistrado Manglano, por su parte, se negó a realizar cualquier valoración sobre la opinión del fiscal general del Estado, contraria a esta tesis, y sólo precisó: "Mi opinión profesional es la que se encuentra plasmada en las actuaciones".

El fiscal Enrique Beltrán no quiso realizar ninguna valoración sobre la opinión privada, manifestada por Leopoldo Torres en San Sebastián, durante el Congreso de la Unión Progresista de Fiscales, de que el caso Naseiro carecía de base penal. "No tengo la suficiente información para pronunciarme sobre unos comentarios privados del fiscal general", aseguró. El fiscal jefe de Valencia señaló, sin embargo, que no tendría más remedio que acatar la decisión de su superior jerárquico "en el caso de que estas declaraciones fueran confirmadas oficialmente'.

Beltrán ratificó su convicción personal, manifestada en otras ocasiones, en el sentido de que las diligencias practicadas por el magistrado Manglano y supervisadas por él y por el fiscal Miguel Ángel Altés, tenían base suficiente para el inicio de una causa penal. "Desconozco si la Sala Segunda del Tribunal Supremo ha practicado algún tipo de diligencia desde el día en que se le remitieron las actuaciones que haya podido desvirtuar los indicios penales", precisó, "pero en caso contrario puedo afirmar que las diligencias remitidas desde Valencia tenían base penal".

El fiscal jefe de Valencia aseguró que las pruebas practicadas en Valencia en relación al caso Naseiro se limitaron a la audición de las cintas que contenían las grabaciones telefónicas y a las declaraciones de los inculpados, que admitieron su autenticidad. "De todo ello podía deducirse la existencia de una conspiración para el cohecho", aseguró.

En relación a la hipótesis sugerida por el fiscal general del Estado de que los interlocutores de las escuchas telefónicas "hablaran de farol", Beltrán omitió cualquier comentario y sólo precisó: "Si en algún momento hubiera pensado que esta afirmación pudiera ser cierta, habría pedido el archivo de las diligencias". El fiscal Beltrán admitió la posibilidad de que las actuaciones del llamado caso Naseiro pudieran ser devueltas al Juzgado de Instrucción número 2 de Valencia en el caso de no prosperar el suplicatorio del diputado Ángel Sanchis. Beltrán afirmó que en este supuesto, no intervendría en las diligencias del caso. "Después de la campaña de prensa que se ha suscitado sobre mi actuación, me mantendría al mar gen para que nadie pensara que no hay objetividad y nombraría un fiscal delegado que tampoco sería Miguel Angel Altés, por lo mismos motivos", subrayó.

Enterrar el caso

El portavoz de Izquierda, Unida en el Congreso de los Diputados, Nicolás Sartorius, calificó. ayer de "imprudentes" las declaraciones del fiscal general, que a su juicio, "dan la sensación de que aquí de lo que se trata es de enterrar todo lo más rápidamente posible", según informa Efe.

En la información publicada ayer por este periódico se recogió que Torres insistió en que no existen discrepancias entre los fiscales que llevaron el caso en Valencia y los que lo llevan ahora ante el Tribunal Supremo. Tal información recordaba el contraste entre las actuales manifestaciones del fiscal general del Estado sobre el caso Naseiro y la convicción mantenida en la pasada Semana Santa por el mismo Torres sobre la existencia de indicios de criminalidad en las conductas investigadas.

En los últimos tiempos, Torres se ha amparado repetidamente en la no existencia de discrepancias entre unos y otros fiscales para justificar la no convocatoria de la Junta de Fiscales de Sala, órgano previsto para asesorar al máximo responsable del Ministerio Público.