"Mi colección es como un lujo íntimo"
Lleva dos años sin presentar colección en pasarela. Jesús del Pozo, 49 años, vuelve a Cibeles con una colección de 30 modelos de noche. "Es un sueño que no sé si podré pemitirme otra vez", confiesa el diseñador.
Pregunta. ¿Qué razones hay para volver a Cibeles?
Respuesta. Tenía una gran necesidad de volver. Quería presentar una colección como nunca la he podido hacer, sin ninguna limitación. Es la esencia de lo que después se puede llevar a unas colecciones más comerciales. Con esto quiero dejar claro que la colección que presento es la fuente de la que después se pueden declinar otras muchas colecciones. Siempre he tenido que declinar en esas colecciones, y esta vez, sin embargo, puedo permitirme el lujo de hacer exclusivamente lo que es la raíz de las ideas y de las cosas.
P. ¿Qué limitaciones ha tenido?
R. Las que yo me he puesto a mí mismo por criterios estéticos. No he tenido limitaciones de otro tipo porque es una colección que no se va a confeccionar.Este año me he podido permitir el lujo de hacer una cosa muy artesanal, muy especial.
P. Se le ve muy ilusionado.
R. Estoy tranquilo, no agobiado como en otras colecciones.
P.¿Por qué abandonó Cibeles?
R. La pregunta seria ¿por qué dejé de hacer prêt-á-porter? Y la respuesta es que porque no había un respaldo industrial sólido.
P. ¿Entonces no es definitiva su vuelta?
R. No. Las cosas tan a largo plazo ya no me las planteo. Llevaba 20 años presentando colecciones, y estaba muy quemado, necesitaba respirar un poco. Como no tenía un respaldo industrial, me permití el lujo de descansar y he recobrado ilusión y fuerza.
P. ¿Qué líneas sigue la colección que presenta?
R. Es una colección corta, de 30 trajes. No he querido meter nada de relleno, quizá no está todo lo que yo quisiese que, esté, pero no hay ninguno que no quisiera que estuviese. No hay una línea concreta, hay un carácter de mujer, una filosofía de vida.
P ¿Cómo definiría su colección?
R. Lujo íntimo.
P. ¿Cómo ve el panorama de la moda española?
R. Yo divido la moda en dos partes indivisibles: la de diseño y la industrial. En España tenemos diseño, pero no industria. Mientras no haya esa unión, no tendremos una moda completa. Salvo algunos diseñadores, que tienen industria propia, no hay un pret-à-porter en España que pueda competir con otros países.
Babelia
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