Subasta de objetos de Antonio Soler

Retratos, bocetos de sus coreografías, sus zapatos, cartas y autógrafos, fotografías y dibujos serán algunas de las más de 1.000 piezas que se subastarán el próximo noviembre, recuerdos todos de uno de los símbolos de la danza española, el sevillano Antonio Soler Ruiz, conocido por Antonio El Bailarín. Con unos precios que oscilarán entre las 5.000 y el millón y medio de pesetas de salida a puja, estos objetos personales y profesionales del bailarín -entre los que se encuentra el mobiliario de su propia casa- estarán expuestos a partir del día 6 de noviembre en la sala de subastas Durán de Madrid, en la que se celebrará su venta los días 20, 21 y 22 del mismo mes. Pinturas, carteles, trajes e incluso los contratos que firmó durante décadas con distintos teatros de todo el mundo antes y después de que Antonio fuera director del Ballet Nacional Español (1980-1983) son otros de los reclamos de la subasta dedicada a este mito de la danza que bailó para reyes y jefes de Estado y que fue el primer artista español que actuara en la Unión Soviética durante el régimen del general Franco. Nacido en Sevilla en 1922, Antonio El Bailarín hizo también de su arte carne de celuloide con las películas Duende y misterio del flamenco, Noches andaluzas, Todo es posible en Granada y Pan, amor y Andalucía, en España. En Hollywood rodó Ziegfiled girls y Canta otra canción. El año 1979 fue el de su retiro de las tablas donde bailó por última vez en Sapporo (Japón). Desde entonces restringió sus apariciones en público a los numerosos premios que le fueron concedidos como la Gran Cruz de Isabel la Católica, la Medalla de Oro de las Bellas Artes y la del Mérito Artístico de Madrid, el Premio de la Universidad de Danza de París o el Nacional de Ballet. En 1993 su salud comenzó a resentirse y después de tres años con importantes recaídas, falleció el 5 de febrero de 1996 en su casa madrileña a consecuencia de una trombosis.-