400 piezas documentan la vida y la tragedia de 200.000 exiliados españoles

Quinientos nombres propios, de los 200.000 exiliados españoles por la guerra civil, enmarcan el recorrido entre los años 1936 y 1978 de la exposición Exilio, inaugurada ayer por el Rey en el Palacio de Cristal del Retiro, en Madrid. Organizado por la Fundación Pablo Iglesias, el montaje recoge 400 piezas sobre 'la historia de la lucha por la libertad', según el comisario, Virgilio Zapatero, ex ministro socialista. Documentos originales, fotografías, publicaciones, carteles, pinturas, esculturas y objetos personales, en gran parte desconocidos, se convierten en homenaje y recuerdo de una tragedia.

Don Juan Carlos, que, según Virgilio Zapatero, mostró 'especial interés' en inaugurar la exposición Exilio, forma parte del comité de honor del proyecto, junto con los presidentes de Argentina, Chile, Colombia, Ecuador, México, Perú y del Consejo de Estado del Reino Unido. El Rey se encontró en el recorrido con imágenes familiares, como las fotografías de los condes de Barcelona y sus hijos en Estoril, en 1949, la formación del primer Gobierno de la transición y el saludo de los Reyes a Dolores Rivas Cherif, viuda de Azaña, en México, en 1978, considerada, junto con el Guernica, de Picasso, una de las últimas imágenes del exilio.

El Rey estuvo acompañado en su visita por la ministra de Educación y Cultura, Pilar del Castillo; el secretario de Estado para la Cooperación Internacional, Miguel Ángel Cortés; el presidente de la Fundación Pablo Iglesias, Alfonso Guerra; el presidente del Tribunal Constitucional, Manuel Jiménez de Parga; el secretario del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero; el presidente de la Comunidad de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, y el secretario de la UGT, Cándido Méndez, además de presidentes de comunidades autónomas y embajadores de los países que recibieron a los exiliados españoles. La visita del Rey, que duró más de una hora, tuvo un momento simbólico en el abrazo a Santiago Carrillo, de quien se exhibe en la muestra un pasaporte falso.

Junto al material documental, con las imágenes de exiliados caminando sobre la nieve, portada de la exposición y del catálogo, la emoción acompañó a Enrique Tapia, de 64 años, que aportó a la muestra una maleta que construyó su padre en el campo de concentración de Argelès (Francia) en 1939 y que le sirvió de cuna desde los tres meses. Conserva la maleta-cuna en su casa de Arganda del Rey (Madrid), entregada por su padre antes de morir, con una manta del cuartel de Pedralbes, donde nació, fotografías de su madre y de su tío y, 'sobre todo', una bandera republicana. 'Mi madre ponía la ropa dentro y, cuando llegaba al campo, la sacaba y me ponía a mí', declaró con lágrimas.

'Una historia de lucha por la libertad' es el planteamiento de la exposición Exilio, según su comisario, Virgilio Zapatero. El proyecto Exilio, que dirige Alfonso Guerra, ha dedicado exposiciones monográficas a Fernando de los Ríos y Pablo Iglesias.

Organizada por la Fundación Pablo Iglesias, ha colaborado el Museo Nacional Reina Sofía, que ha dejado la sala de exposiciones del Palacio de Cristal del Retiro madrileño. Para su director, Juan Manuel Bonet, la muestra significa 'la recuperación de la memoria histórica a través de numerosos archivos'. Destacó ayer en la presentación la 'dimensión histórica y de reencuentro', junto con la presencia del Rey.

La muestra quiere ser 'homenaje y recuerdo' a todos los exiliados que, según Zapatero, ofrecieron la cifra de 200.000 personas que formaron el exilio permanente, 'un desplazamiento de población no recordado nunca en España', ya que la expulsión de los judíos y moriscos llegó a las 70.000 personas. 'Los exiliados mantuvieron vivos los ideales de la libertad, del Estado de derecho y la soberanía nacional. Fueron durante 40 años la conciencia liberal de España'.

El arquitecto Jesús Aparicio ha diseñado un pequeño edificio blanco dentro del Palacio de Cristal para 'acentuar la sobriedad'. Los 500 nombres de exiliados, famosos y desconocidos, impresos en una cortina de cristal, marcan la itinerancia del exilio y los planos de sombras de luces con una panorámica sobre el Retiro.