La caja de la risa

Una familia concertada con parte de otras dos, en la que ellas, sofisticadas, domestican a los asilvestrados taberneros (Los Serrano). Un bar, escenario de terapia para una parroquia que se resiste a madurar (7 vidas). Una comunidad de vecinos donde no hay rellano que se salve (Aquí no hay quien viva). Una colonia de adosados donde la vecina es la insufrible suegra, madre de un marido pusilánime (Casi perfectos). Cuatro ideas (las dos primeras en Tele 5, las últimas en Antena 3) que se han convertido en las rentables apuestas de las cadenas privadas en el terreno de la ficción. Más o menos grueso, poco o muy inteligente, tienen su punto de partida en el humor.

Otra serie se incorpora esta noche a la lista con un poco de todas las anteriores: Mis adorables vecinos (21.55, Antena 3). Y ya se trabaja en nuevos proyectos de comedia: Paco Arango (¡Ala... Dina!) empieza a rodar en julio, para la cadena propiedad de Planeta, El inquilino, la historia de un extraterrestre de última generación, con efectos especiales y 3D, mientras José Luis Moreno -productor de Aquí no hay quien viva- desarrolla una tira diaria -La sopa boba, sobre una mujer en pleno proceso de separación- a la que los programadores aún tienen que encontrar hueco en la parrilla de tarde. Todos los planes de futuro "van encaminados hacia la comedia", reconoce Tedy Villalba, responsable de ficción de producción propia de Antena 3.

Tele 5, por su parte, anda embarcada junto a Videomedia (Hospital Central) en el diseño de otro alienígena -Caído del cielo- con la teleserie Alf en el recuerdo; Telespan -avalada por los éxitos cinematográficos de El otro lado de la cama y Días de fútbol- debutará en televisión con la sit-com Maneras de vivir, igual formato que Amigos íntimos, el guión que la cadena gestionada por Mediaset ha confiado a Miramón Mendi, la productora del ubicuo Moreno.

Los pinchazos de la temporada pasada -Código fuego, Una nueva vida, El Pantano, Un lugar en el mundo- no pertenecían precisamente al género del humor. Sólo sobrevivió (y cómo) el estreno de Los Serrano. Con una audiencia media de más de siete millones de espectadores y una cuota de pantalla del 40%. Aquí no hay quien viva le sigue de cerca, mientras 7 vidas, la más veterana de todas -se estrenó el 17 de enero de 1999- se sitúa por encima de los cinco millones. Un resultado tan satisfactorio como para que los responsables de ésta anden ya pensando en una spin-off (historia segregada) protagonizada por Aída, la mártir del mocho del bar Kasi Ke No.

La comedia es un "producto familiar", apunta Alberto Carullo, director de antena de Tele 5. Y después de años de series profesionales y policiacas, "habíamos descuidado que la familia se sentara junta a ver la tele", reconoce Daniel Écija, ejecutivo de Globomedia, productora que firma gran parte de estos éxitos: Los Serrano, 7 vidas y Casi perfectos... así como el estreno de esta noche. Lo difícil es "dar con el tono adecuado. Evitar el humor simple y fácil", añade Carullo. Tampoco hay que invertir un gran presupuesto en persecuciones, laboratorios, efectos especiales... "Pero nos estamos volcando en los castings", se defiende Villalba. "Como en Mis adorables vecinos", precisa. Con Paz Padilla a la cabeza, el reparto cuenta con Miriam Díaz Aroca, Francis Lorenzo y Juanjo Cucalón, entre otros. Las contrastes entre las familias de dos chalés adosados -unos ricos de toda la vida y otros desde que la niña ganó un concurso de artistas en televisión- dan pie a la línea argumental. Granujas de medio

pelo, de Woody Allen, es uno de los referentes cinematográficos que cita el director, Manuel Valdivia (Compañeros, Policías). No faltan los números musicales; no en vano, la pequeña de los Sánchez (Padilla y Cucalón) superó en la final de El gran salto a la fama a la mismísima Chenoa (uno de los cameos del estreno).

Y de nuevo, como ya sucediera a principios de febrero con Los Serrano y Casi perfectos, con Mis adorables... y 7 vidas volverán a coincidir en la parrilla dos producciones de Globomedia. La primera, una comedia de costumbres, la segunda, de un humor más ácido. La clave está en "conseguir que el público se sienta identificado", explica Écija, una opinión que comparte el director de antena de Tele 5. Y "en la cercanía", añade su colega de Antena 3, para quien todo se reduce "a una explicación básica: la gente necesita reírse".