Consell y Gobierno se enzarzan, de nuevo sin datos, sobre el volumen de la inversión estatal

Como en una pelea de niños, con el consabido y tú más -en este caso más bien y tú menos- el Consell y el Gobierno central se enzarzaron ayer de nuevo -y, una vez más, sin aportar datos concretos- en una guerra de declaraciones en torno al volumen de las inversiones estatales en la Comunidad Valenciana. Abrió fuego el vicepresidente tercero de la Generalitat, Juan Cotino, quien exigió al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, que invierta en las obras de infraestructuras que el Ejecutivo tiene que realizar en la Comunidad Valenciana el mismo dinero por habitante que invierta en Cataluña. En el más puro estilo de la política de declaraciones que guía al Consell, Cotino afirmó que el Gobierno valenciano "no va a tolerar que el caos de Cataluña" sirva para que a la Comunidad Valenciana le "quiten" el dinero que se debe destinar a las infraestructuras de esta región "y se lo den a Cataluña". El también consejero de Bienestar Social precisó: "Si Zapatero y su Gobierno han creado un caos en Cataluña, la solución no está en quitarnos las inversiones que desde hace mucho tiempo venimos reclamando y que Zapatero nos niega".

La contestación llegó por boca del delegado del Gobierno, Antoni Bernabé, quien aseguró que el Ejecutivo central "ha duplicado" la inversión que se hacía en infraestructuras en la Comunidad Valenciana cuando gobernaba el PP, y añadió que cada año se destina a este territorio más de 5 millones de euros. Bernabé pidió a los miembros del Consell que abandonen el discurso "victimista, que enarbola el Partido Popular y que se pongan a trabajar en beneficio de los valencianos".

Las declaraciones de Cotino se enmarcan, según Bernabé, en "la política de engaños y de mentiras del PP de la Comunidad Valenciana, con el único fin de ocultar la marginación y el abandono al que sometieron a los valencianos durante los ocho años de Gobierno de José María Aznar". El delegado instó a los miembros del Consell a colaborar con el Gobierno central y a no poner trabas a las iniciativas que se están desarrollando desde el Ejecutivo, como son las actuaciones que se están desarrollando para resolver el déficit hídrico.