Nueve detenidos por vandalismo y desórdenes tras el crimen de Sant Joan de Girona

Los Mossos d’Esquadra han detenido a nueve hombres, de entre 34 y 55 años, como presuntos autores de los actos vandálicos y desórdenes públicos cometidos en Girona y Figueres, ocurridos tras el doble crimen que tuvo lugar la noche de la verbena de Sant Joan, el 23 de junio, en el marco de un enfrentamiento entre familias. Los mossos han practicado las detenciones entre el 26 de julio y este 1 de agosto, todas ellas relacionadas por el asalto a viviendas del presunto asesino o de sus familiares y dos de ellas, además, por los incidentes ocurridos en el hospital Josep Trueta de Girona tras el doble crimen. El juez de guardia

El juez de guardia ha dejado en libertad a ocho de los nueve detenidos. Todos ellos se han acogido a su derecho a no declarar y la Fiscalía no ha solicitado medida cautelar alguna, por lo que el juez tampoco ha acordado ninguna medida y se ha inhibido en favor del juzgado de Figueres que conoce la causa por los incidentes.

Durante la pasada verbena, una pelea entre clanes familiares en el barrio de la Font de la Pólvora de Girona acabó con un hombre de 48 años y una mujer de 42 fallecidos y otras dos personas, una de ellas menor, heridas de gravedad, en el transcurso de una disputa que derivó en un tiroteo y en un atropellamiento mortal. Horas después, un numeroso grupo de personas se personaron en el hospital Josep Trueta, donde estaban ingresados los heridos, con intención de acceder al mismo, lo que obligó a los Mossos a intervenir.

Unas 150 personas, entre familiares, amigos y vecinos de las víctimas, acudieron al hospital e irrumpieron en su interior tras romper la línea policial que se había dispuesto. Esos individuos golpearon, empujaron y agredieron a los agentes que formaban un cordón para garantizar la seguridad de los trabajadores y usuarios del hospital. Por lo que se refiere a los daños a viviendas, primero fue en dos inmuebles de la capital gerundense, causados por una cincuentena de hombres el 24 de junio y, cuatro días después, un centenar de personas asaltó a otras tres en el barrio de Sant Joan de Figueres. Todas ellas eran viviendas del presunto asesino -que está en busca y captura- o de sus familiares.

Estos individuos iban armados con palos, picos, martillos, hachas, palas, azadas y bastones y, aunque durante los asaltos nadie resultó herido, se abrió una investigación para identificar y detener a los autores de los delitos. Los arrestados, que cuentan con antecedentes, han pasado a disposición del juzgado de instrucción en funciones de guardia de Girona. La investigación para la localización del autor del doble crimen continúa abierta y activa y se mantiene un dispositivo policial en el barrio de Font de la Pòlvora con efectivos de orden público.

Puedes seguir a EL PAÍS Catalunya en Facebook y X, o apuntarte aquí para recibir nuestra newsletter semanal