Rusia lanza un ataque con misiles contra Kiev
Las autoridades de la capital ucrania informan de al menos un muerto y 13 heridos
El centro de Kiev amaneció este viernes bajo un estruendo de sirenas y explosiones. Rusia atacó la capital ucrania a primera hora de la mañana con cinco misiles balísticos. Las autoridades aseguraron que los habían interceptado todos. Los fragmentos de los cohetes han provocado destrozos en varios distritos. Una persona ha muerto y al menos 13 han resultado heridas.
Las alarmas antiaéreas —que avisaron dos veces del lanzamiento de drones durante la madrugada—, alertaron sobre las 6.30 de la mañana (una hora menos en la España peninsular) de que un ataque con misiles era inminente en todo el país, tras detectar el despegue de cazas bombarderos MIG-31K en Rusia. Varias explosiones fuertes en la capital corroboraron la alarma sobre las 7.00. Los habitantes, que ya tienden a ignorarlas, esta vez sí bajaron a los refugios. Sobre las 7.45, cuando se desactivaron las alertas antiaéreas, comenzaron a recorrer la capital las de los vehículos de emergencia.
Las Fuerzas Aéreas ucranias informaron de que Moscú empleó en el ataque cinco misiles balísticos Iskander-M/KN-23. Los cohetes procedían de las regiones rusas de Voronezh y Briansk y según la información oficial, todos fueron derribados por las defensas antiaéreas.
La víctima mortal fue un varón de 53 años, según las autoridades. Los heridos son hombres y mujeres, de entre 19 y 58 años, la mayoría con “múltiples heridas de metralla y contusiones”. Cinco de ellos tuvieron que ser hospitalizados, según la Administración Militar de Kiev.
Además de los misiles contra Kiev, Rusia lanzó 60 drones por todo el país y atacó ciudades como Jersón y Krivii Rih. El Kremlin se jactó este viernes de los bombardeos. Su portavoz, Dmitri Peskov, subrayó que esta es la respuesta rusa a los ataques contra instalaciones militares en su propio territorio. “La posición de Rusia, expresada por el presidente [Vladímir] Putin en San Petersburgo [en septiembre], se mantiene. Algunas instalaciones en territorio ruso han sido destruidas y el presidente dijo que siempre habría una respuesta”, respondió Peskov en su rueda de prensa diaria, informa desde Moscú Javier G. Cuesta.
El Ministerio de Defensa ruso especificó que el ataque a la capital fue en respuesta al lanzamiento por parte de Ucrania de seis misiles ATACMS de largo alcance de fabricación estadounidense y cuatro misiles Storm Shadow de fabricación británica contra la región de Rostov un día antes. En un comunicado, aseguró que el objetivo del bombardeo era un centro de mando perteneciente a la agencia de inteligencia ucrania SBU; la oficina de diseño Luch en Kiev que, según dijo, está involucrada en el diseño y fabricación de misiles y un sistema de misiles antiaéreos Patriot de fabricación estadounidense. “Todos los objetivos han sido alcanzados”, afirmó el Kremlin.
Volodímir Zelenski, presidente de Ucrania, pidió que no se perciba como rutinaria “este tipo de locura rusa”. “El terror cotidiano exige aumentar constantemente la presión sobre el terrorista”, escribió en redes sociales. El dirigente instó a aprobar más sanciones contra Moscú y agradeció a los socios que envían defensas antiaéreas y armamento para combatir al agresor.
En el distrito de Holosiivskii, en el centro de Kiev, resultaron dañados edificios de oficinas, un hotel, el asfalto de una avenida y una tubería de gas, y se incendiaron varios coches. También fueron alcanzados edificios en los distritos de Shevchenkivskii y Solomianskii.
Dos de las explosiones, muy seguidas, se registraron en las avenidas Antonovich y Velika Vasilkivska, en el distrito de Holosiivskii. Entre ambas calles se encuentra el hotel Holiday Inn. Un huésped portugués, César Soares, contaba con un café en la mano que siete minutos después de una de las alarmas antiaéreas de la mañana, escuchó una enorme explosión y desde su ventana vio una gran bola de fuego y humo amarillo. El hotel activó una alarma de evacuación y salió de su habitación a toda prisa a medio vestir. “Unos 37 segundos después, mientras bajaba por las escaleras para ir al búnker, se oyó la segunda explosión”, relataba señalando a su habitación desde la calle.
Los dos bombazos, a pocos metros de distancia, reventaron todas las ventanas de la fachada del hotel y su habitación quedó destrozada y cubierta de cristales. La onda expansiva sembró la misma callejuela entre las dos avenidas, árboles incluidos, de papeles mezclados con escombros que salieron volando de una oficina adyacente. “Si no hubiese salido en ese momento, habría resultado herido”, compartió Soares, tranquilo. Otro huésped, Ievgen, de Járkov, también se refugió en el sótano del edificio y salió poco después para comprobar si su coche, aparcado en la avenida Antonovich, había resultado dañado.
Detrás del establecimiento, frente a la catedral de San Nicolás, el centro de negocios Toronto —un complejo de oficinas— quedó destrozado. Un gran agujero dejó al descubierto la planta 15ª de un edificio colindante, donde se registró un incendio. La explosión reventó ventanas en los alrededores a una distancia de hasta 300 metros y sembró de cristales rotos las aceras. El tráfico de estas arterias del centro de Kiev estaba prácticamente desaparecido este viernes por la mañana. Con bastante rapidez, los servicios de emergencia y limpieza recogieron escombros y cristales y una relativa normalidad volvió horas después a esta zona de la capital.
Las embajadas de Portugal, Albania, Argentina, Macedonia del Norte, Palestina y Montenegro, localizadas en un edificio cercano, sufrieron también algunos daños. En ausencia del embajador ruso en Lisboa, el Gobierno portugués ha convocado al encargado de negocios de la Federación Rusa para presentarle una protesta formal.
El gobernador en funciones de la región rusa de Kursk informó también de un ataque ucranio con misiles en la ciudad de Rylsk. Según Alexander Khinshtein, seis personas, entre ellas un niño, murieron y 10 resultaron heridas.
El jueves, Rusia llevó también a cabo el mayor ciberataque de los últimos meses contra Ucrania. Este viernes, la ministra de Justicia, Olga Stefanishina, informó de que se había suspendido “temporalmente el trabajo de los registros estatales unificados”. “Este ataque tenía como objetivo interrumpir el funcionamiento de la infraestructura crítica del país y sembrar el pánico entre los ciudadanos ucranios y en el extranjero. Estamos trabajando para contrarrestar el ciberataque y restaurar los sistemas afectados”, aseguró la ministra en su perfil en X.
El bombardeo sobre la capital se produce solo un día después de que el presidente ruso, Vladímir Putin, propusiera un “duelo” de misiles con Estados Unidos que demostraría cómo el nuevo misil balístico hipersónico ruso Oréshnik podría derrotar a cualquier sistema estadounidense de defensa antimisiles.
“Que elijan cualquier instalación para que la ataquemos, digamos, en Kiev. Que concentren allí todas sus sistemas antiaéreos y antimisiles. Y nosotros atacaremos con [un misil] Oréshnik. Y veremos qué pasa. Nosotros estamos preparados para ese experimento”, dijo Putin el jueves durante su conferencia de prensa anual.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.