Oreja prepara la reorganización del Ministerio de Asuntos Exteriores

El ministro de Asuntos Exteriores, Marcelino Oreja, prepara una importante reestructuración administrativa de su departamento con la creación de una Secretaría de Estado de Asuntos Exteriores, una Subsecretaría de Cooperación Internacional y una Dirección General de Asia. Amén de estos nuevos puestos, el Ministerio contaría con la Subsecretaría encargada del Servicio Exterior y de la Carrera Diplomática, ya existente, y con las vigentes direcciones generales.

Esta reforma administrativa y una posible combinación de embajadores que podría afectar esencialmente a América Latina y Europa podrían haber sido los temas centrales de las conversaciones que el ministro Oreja mantuvo ayer con el presidente Suárez en el palacio de la Moncloa, a petición del jefe de la diplomacia española. La situación política del Magreb también pudo estar incluida en el diálogo.La expectativa de esta reorganización administrativa del palacio de Santa Cruz ha relanzado el concurso de listas de altos cargos posibles para este Ministerio. El puesto más codiciado sería, sin duda, el de secretario de Estado de Asuntos Exteriores o segundo responsable del Ministerio, cuya función principal sería la de descargar al ministro de compromisos políticos y diplomáticos, dándole a su representación un rango superior. Para este puesto, eminentemente político, se barajan nombres próximos a la carrera y al staff de UCD, como el de Gabriel Cañadas, actual secretario de Estado del Ministerio de Cultura. Otros nombres en circulación son los de Joaquín Muñoz Peirats, diputado de UCD por Valencia, Ignacio Camuñas y Fernando-Arias Salgado, actual director general de RTVE. Luis Gámir aparece como candidato a la Subsecretaría de Cooperación Internacional, en la que el ministro desearía colocar a un técnico que mantenga relaciones de alto nivel con los ministerios económicos.

Fidel, a España en julio

El actual subsecretario y encargado del Servicio Exterior, José Joaquín Puig de la Bellacasa, podría permanecer en el puesto o pasar a dirigir la embajada de España en Londres, en sustitución del marqués de Perinats, quien podría ocupar algún puesto de relevancia en el palacio de La Zarzuela en un futuro no lejano.La nueva Dirección General de Asia, que surgirá del lógico desglose de la actual de Asia y Africa continental, puede ser dirigida por el cónsul general de España en Hong Kong, Jaime de Ojeda, experto en cuestiones asiáticas y buen conocedor del idioma chino. Tampoco se excluyen cambios en otras direcciones generales, como la de la Oficina de Información Diplomática. Su actual director, Máximo Cajal, ha solicitado su relevo del puesto al ministro Oreja, quien, a su vez, le ofreció la embajada de España en La Habana, puesto que, al parecer, se resiste a dejar el actual embajador, Enrique Suárez de Puga, quien desearía una dirección general en Madrid y, antes, el poder coordinar el viaje de Fidel Castro a Madrid y seguir en septiembre la conferencia de países no alineados de La Habana.

Sobre la visita de Fidel Castro se tiene la imoresión de que ésta podría celebrarse en el curso del próximo mes de julio. El tema puede ser objeto de las conversaciones que celebrarán en Madrid los ministros de Asuntos Exteriores de ambos países la semana próxima, con motivo de una escala técnica que el señor Malmierca realizará en la capital española el próximo día 29. En la embajada de Cuba en Madrid se trabaja ya en la preparación de este viaje, pendiente aún de fechas definitivas.

La sustitución de Máximo Cajal, que puede ser inmediata, puede recaer en Eloy Ibáñez, diplomático en excedencia que ha trabajado en el servicio exterior de RTVE, o en el propio número dos de la OID, José Manuel Allendesalazar. También se habla de un posible relevo en la Dirección General de Iberoamérica, que preside Salvador Bermúdez de Castro, quien aparece, en compañía del señor Cajal, como primeros candidatos en la posible combinación de embajadores que se perfila en Latinoamérica, y en la que se barajan los puestos de Cuba, México, Chile, Uruguay y Ecuador, entre otros. Una combinación de la que queda excluida América del Norte y muy concretamente la embajada de España ante las Naciones Unidas, porque, al parecer, Madrid presentará a su, embajador, Jaime Piniés, como candidato a la próxima presidencia de las Naciones Unidas, como representante del grupo europeo, y en contra de las aspiraciones de la República, Federal de Alemania. Por último, y en lo que a Europa se refiere, no se excluyen posibles variaciones en las embajadas de Londres -ya mencionada-, Roma, Bonn y Bruselas. Candidato a uno de los puestos de Roma lo es José María Moro, ex presidente del Centro Iberoamericano de Cooperación.

El ministro espera completar, para antes del verano, su reorganización diplomática con los nombramientos de los nuevos destinos en embajadas que han de surgir de las decisiones de la próxima reunión en junio de la llamada Junta de la Carrera, que retrasó sus deliberaciones a la espera de los exámenes de la última promoción de la Escuela Diplomática.

Permanecen, por último, pendientes de una seria reorganización los cuerpos administrativos de Asuntos Exteriores (cancilleres, administrativos, auxiliares, etcétera), surnidos en muchos casos en enormes dificultades económicas y, laborales, que pueden desembocar en una protesta generalizada. de los mismos, como, al parecer, ya ocurrió con algunos cancilleres de España en Argentina. Los sindicatos UGT y CCOO del Ministerio parecen ocuparse ahora de estas situaciones. Mientras tanto, la llamada Asociación Profesional de la Carrera ha suspendido sus amenazas de huelga de antes de las elecciones legislativas, que quedó relegada a posteriores conversaciones con los responsables del Ministerio.