La crisis del PC de Asturias afecta a Comisiones Obreras
La crisis surgida en el PC de Asturias con la dimisión de ocho dirigentes avilesinos afecta también a CCOO, según se desprende de una declaración pública hecha ayer por José Fernández Díaz, miembro de la comisión de acción sindical de la Federación de la Construcción estatal de CCOO, quien afirma que esta central sindical «adolece de un vicio general: el apoltronamiento de la dirección. Así, por ejemplo, la vida licenciosa de algunos de sus líderes es harto conocida. Este vicio se manifiesta en burocratismos, clientelismos y favoritismos».
El señor Fernández Díaz agrega que la afiliación a CCOO descendió desde septiembre del año pasado de 67.656 cotizantes, a 45.000, y acusa a la dirección de desatender a la región y a sus cuadros dirigentes sindicales. «Consecuentemente con lo anterior», añade, «CCOO atraviesa una fase de descrédito generalizado en Asturias, perdiendo constantemente poder de convocatoria.»
El dirigente sindical se manifiesta finalmente de acuerdo con el escrito divulgado por los ocho dirigentes comunistas avilesinos (véase EL PAÍS de 12-10-1979), en el que justifican la dimisión de sus cargos directivos en la incapacidad de la dirección y en la escasa o nula incidencia del partido en los distintos frentes de lucha, a la vez que piden la revisión de los expedientes disciplinarios a que fueron sometidos numerosos militantes del PCE, a causa de la conflictiva conferencia regional de Perlora, de marzo de 1978, y solicita la apertura de un proceso de discursión en todas las organizaciones del partido sobre la situación política y organizativa, que culmine con la celebración del congreso constituyente del Partido Comunista de Asturias (PCA).
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