Polémica sobre la nueva ubicación del Instituto de Fomento a la Exportación

El Instituto Nacional de Fomento a la Exportación (INFE), creado en abril de este año dentro del marco del programa de inversiones públicas extraordinarias y de medidas favorecedoras a la promoción y exportación de productos españoles, y que apenas ha empezado a funcionar, se ha convertido en el foco de las miradas de los que piensan en un comportamiento impropio de la Administración ante los previsibles cambios electorales.

La rapidez con que se quiere realizar el traslado físico de la Dirección General de Política Económica y Previsión, desde su actual ubicación -unas plantas del antiguo Ministerio de Comercio- al edificio Oficial del Ministerio de Economía, para que el INFE se instale definitivamente en todo el edificio de Castellana, 14, parece injustificada "teniendo en cuenta la proximidad de las elecciones, de las que resultará un nuevo Gobierno y, posiblemente, modificaciones en la estructura orgánica de la Administración que podrían afectar a esta Dirección", en opinión de los funcionarios y personal contratado de Política Económica quienes han manifestado su oposición al traslado a través de una carta dirigida al subsecretario de Economía y Comercio.La justificación que estos funcionarios dan para solicitar la reconsideración o el aplazamiento del traslado, aparte las posibles modificaciones administrativas que resulten del nuevo Gobierno, se basan en que hace ahora apenas un año que cambiaron ya de sitio y que si son trasladados nuevamente al edificio de Economía y Comercio las distintas unidades de la dirección estarán repartidas en diversas plantas; todo ello al margen del nuevo gasto derivado del traslado.

Prisas sin justificar

La contestación de altos funcionarios del Ministerio a este escrito se ha limitado a decir que los que se oponen lo hacen porque no quieren verse sometidos al sistema de horario y de trabajo del resto de Economía y Comercio.En, medios cercanos al personal que se quiere -trasladar para proporcionar un lugar físico identificable con el INFE se señala que lo extraño son las prisas con que se quiere realizar el traslado, no justificado en función de la actividad que viene desarrollando dicho Instituto, máxime si se tiene en cuenta la posible remodelación administrativa que seguirá a las elecciones generales. Además, no se entiende que un organismo como el INFE necesite un edificio en el que antes estaba el Ministerio de Comercio y que estaba destinado a albergar al Ministerio de Economía antes de su fusión con Comercio. También sorprende la desproporción entre los medios y la capacidad operativa del INFE.

También se plantea si no se está tratando de hacer del Instituto un lugar donde recalarán toda una serie de funcionarios de Economía y Comercio muy identificados con la última etapa ministerial y que tendrían un dificil acomodo en un nuevo Gobierno, si se tiene en cuenta que es habitual que a un nuevo Gobierno le sigan importantes cambios en las estructuras administrativas.