La Mesa por el Referéndum pide que el decreto de convocatoria incluya el carácter vinculante
La Mesa por el Referéndum, organismo que engloba a diversos partidos y organizaciones y que preside el catedrático Ramón Tamames, pidió ayer que el carácter vinculante del referéndum sea incluido en el decreto de convocatoria enviado por el Gobierno al Congreso y que será debatido esta semana. Por su parte, y simultáneamente al inicio del debate sobre política exterior y seguridad, que se celebra hoy en el Congreso, todos los partidos, colectivos y grupos partidarios de la salida de España de la Alianza Atlántica comienzan su precampaña para pedir el no en el referéndum sobre la OTAN con debates y manifestaciones.
Representantes de la Mesa por el Referéndum, que preside Tamames desde su constitución en julio de 1984, pidieron ayer, en conferencia de prensa, que el decreto de convocatoria del referéndum incluya su carácter vinculante puesto que de otra forma no existen garantías, después de tantas observaciones y contradicciones como ha habido desde el Gobierno". Para la Mesa, la inclusión de tal carácter vinculante es necesaria a fin de "evitar cualquier otra de disolución de las Cortes para eludir el posible voto favorable a la salida de la OTAN e ir así a una especie de segunda ronda en las elecciones generales".Tamames, que leyó una declaración de 10 puntos elaborada por la Mesa por el Referéndum, declaró que "no sería objeto de inconstitucionalidad que figurase el carácter vinculante en el decreto".
La declaración de la Mesa, que considera la convocatoria del referéndum como "una conquista popular" señala que la pregunta presentada por el Gobierno para ser sometida votación "dista mucho de la claridad, puesto que aparte de referirse a la Alianza Atlántica y no a la OTAN, y aparte de relacionarse con la postura del Gobierno en vez de la pura salida o permanencia, contiene un preámbulo absolutamente engañoso".
Según la declaración, se promete la no incorporación de España a la estructura militar integrada "cuando de hecho esa integración ya se encuentra en curso con la presencia en 22 comités militares de distinto tipo". Sobre la desnuclearización del territorio español -otro de los puntos contenidos en el preámbulo de la pregunta-, la Mesa señala que "la experiencia de la mayoría de los países de la Alianza Atlántica consiste en lo contrario". Sobre la reducción de la presencia militar norteamericana, la declaración afirma que "es evidente que Estados Unidos no ha querido negociar nada hasta después del referéndum y no ha adquirido ningún compromiso en una cuestión que, por lo demás, se sitúa fuera del tema estricto de la OTAN".
Denuncia del tratado
Finalmente, la declaración de la Mesa señala que si el Gobierno pierde en la convocatoria por una mayoría de votos favorables a la salida de la OTAN "este resultado no va a crear ninguna inestabilidad política si realmente se acata la decisión mayoritaria y si de inmediato se inicia el procedimiento para denunciar la presencia de España en el Tratado de Washington de 1949 por el cual se creó la Alianza Atlántica". El representante de Comisiones Obreras en la Mesa por el Referéndum, Julián Ariza, denunció que algunas fuerzas políticas están utilizando el referéndum como campaña para las elecciones.Por su parte, la Coordinadora Estatal de Organizaciones Pacifistas (CEOP) y la Plataforma Cívica por la Salida de España de la OTAN, las dos principales organizaciones que llevan el peso en la campaña en contra de la permanencia en la Alianza Atlántica, han convocado para esta tarde, en Madrid, una concentración, coincidiendo con el debate parlamentario que se inicia en el Congreso de los Diputados. La concentración se organizará con la previa formación de cuatro columnas con antorchas que, partiendo de distintos puntos, concluirá en la plaza de Santa Ana, donde el ex comandante Luis Otero leerá un comunicado de reafirmación de las razones clásicas de petición de salida de España de la OTAN y de denuncia de la pregunta formulada por el Gobierno.
Además de la manifestación, han sido programados diversos actos de debates paralelos al parlamentario, con intervención de los detractores de la Alianza Atlántica. La Coordinadora Estatal de Organizaciones Pacifistas ha convocado un debate en el Ateneo madrileño, con la participación de uno de sus portavoces, Carlos Otamendi, el abogado Fernando Salas y el filósofo Javier Sádaba, entre otros. Por su parte, la Plataforma Cívica se presenta hoy en la facultad de Económicas de la universidad Complutense de Madrid, con la intervención de Enrique Curiel, por el PCE, y de Ramón Tamames y José Alonso Puerta, del Partido de Acción Socialista (Pasoc).
En distintas capitales de España han sido convocadas también manifestaciones y concentraciones a favor de la salida de la OTAN. En Bilbao, una manifestación recorrerá distintas calles para dirigirse al edificio del gobierno civil, donde los participantes efectuarán una pitada contra el PSOE "como responsable político" de la integración del España en la OTAN", según la convocatoria anunciada.
Los actos de ayer
Ayer, en Madrid, y como preludio de la concentración que se desarrollará esta tarde en la capital española, los colectivos pacifistas organizaron acciones de protesta y hogueras, con quema de símbolos de la OTAN, en distintos barrios y pueblos de la capital.El ahogado José María Mohedano en representación de la Plataforma Cívica por la Salida de España de la OTAN se entrevistó ayer por la tarde con el director de los Servicios Informativos de TVE, Enric Sopena, a quien pidió que en los telediarios se incluya a lo largo de la campaña información referente a las actividades de los colectivos anti-OTAN. Sopena, según manifestó Mohedano, "se mostró sensible" a la propuesta, le prometió estudiarla y le adelantó su deseo de llevarla a la realidad.
La Coordinadora de Conúsiones por la Paz y la Libertad, que agrupa a distintos sectores cristianos y entidades de tipo cultural y cívico, entregó ayer en Madrid a diputados del Grupo Mixto, entre ellos Agustín Rodríguez Sahagún, del CDS, y Francesc Vicens, de Esquerra Republicana de Catalunya, un total de 200.000 telegramas, con cinco firmas cada uno, en los que se reclama un referéndum "sin trampas y claramente vinculante".
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