AIFISA negocia la venta de inmuebles para levantar su Suspension de pagos, de 7.000 millones de pasivo

La inmobiliaria AFISA ha puesto en vota sus dos propiedades más importantes el hotel Sanvy de Madrid y el complejo Ta nau, (hotel y apartamentos) de Baqueira Beret- para levantar la suspensión de pagos que presentó el 1 de julio. El pasivo de la suspensión supera los 7.000 millones de pesetas y los principales acreedores son el grupo sueco Fermenta, la Caja de Cataluña, la Caja Postal y la constructora OCISA.

El expediente de la suspensión de pagos de la inmobiliaria AFISA -una de las que más protagonismo tuvo durante el boom inmobiliario de los ochenta- recayó en el juzgado número 40 de Madrid, que llevará el asunto por la vía de urgencia. El titular del juzgado ha nombrado interventores a Joaquín Lliach Rovira y a Miguel Guijarro, a los que ha pedido que concluyan el balance antes de fin de mes.La diligencia que ha impuesto el juez ha obligado a actuar con igual rapidez al equipo jurídico contratado por AFISA, el bufete de Crispín de Vicente. El abogado José Luis de Vicente ha iniciado las negociaciones con los principales acreedores para poder firmar un convenio. El proyecto consiste en vender las dos propiedades más impotantes de AFISA y obtener los recursos suficientes- para levantar la suspensión de pagos. Fuentes del entorno de la inmobiliaria han manifestado que la situación de la empresa va a obligar a vender a la baja.

Ya existe un principio de acuerdo con la Caja Postal sobre el Hotel Sanvy, ubicado en la madrileña plaza'de Colón y regentado por la cadena NH Hoteles.. Según el convenio, la Caja Postal (del grupo público Argentaria) subrogaría los 1. 150 rnillones de pesetas que le debe AFISA al comprador del inmueble, que podría ir pagando con letras garantizadas. Entre los posibles compradores está la propia NH Hoteles y un grupo británico, según fuentes de AFISA. El hotel fue valorado en 4.500 millones en 1992.

En el otro frente los pasos serían similares. Se trata del complejo residencial Tanau de la estación invernal de Baqueira Beret en el Pirineo catalán. El complejo incluye apartamentos y el Hotel Tanau, y está regentado por la cadena Tryp. Arrastra una hipoteca de 2.200millones de pesetas con la Caja de Cataluña, que tendría que admitir una subrogación por la misma cantidad por parte del comprador. Según las fuentes consultadas, hay dos potenciales compradores, un grupo catalán, que podría orquestar la propia Caja de Cataluña, y otro extranjero.Además de las dos subrogaciones, AFISA quiere obtener la liquidez suficiente para solventar la deuda con el resto de acreedores, entre los que destaca el grupo sueco Fermenta, ex accionista de AFISA, que tiene un riesgo en la inmobiliaria de 3.000 millones. Otro acreedor es la constructora OCISA, que ha levantado los apartamentos de Baqueira.

Control sueco

La suspensión de pagos de AFISA ha sido el colofón de una historia de más de tres años de sonambulismo de esta sociedad. La empresa, que estaba controlada por el empresario inmobiliario Luis García Cereceda (Lugarce) y presidida por Petra Mateos (jefa de gabinete de Miguel Boyer cuando éste fue ministro de Economía), fue vendida a los grupos suecos Fermenta, Betula y Folkhen. Ahora está regida por el grupo también sueco Independent, que controla en torno al 95% del capital y que está vinculado a Fermenta.En 1990, dimitieron los consejeros que representaban al turidador, García Cereceda, y un año más tarde Petra Mateos. Pero los mayores problemas se producen cuando se aprueba una OPA de exclusión y se conoce la excesiva autocartera que tenía la sociedad. La Comisión de Valores inició investigaciones sobre AFISA, pues los consejeros del grupo adquirieron el 6% de autocartera a más de 4.500 pesetas; es decir 2.500 más que el precio de la OPA.