Goya recuerda a los nacionalistas vascos que negar ayuda a la justicia está penado

El dimisionario gobernador civil de Guipúzcoa, Angel Goya, se despidió ayer de su cargo calificando de "ejemplar" la actuación policial en el caso Elejalde y descalificando a los políticos que la prejuzgaron y dieron pábulo a las sospechas de torturas. "Si el PNV tiene datos para sostener esas acusaciones, le recuerdo que hay un artículo del Código Penal que condena la denegación de auxilio a la Justicia", advirtió.Goya, cuyo puesto será ocupado por el actual gobernador de Huesca, Eduardo Ameijide -se prevé que sea nombrado en el Consejo de Ministros del próximo viernes-, reiteró que las manifestaciones de esos dirigentes "hacen el juego a los que asesinan" y son indicativas de su falta de "sentido de Estado".

A continuación, Goya explicó que su dimisión no implica la asunción de una culpa personal, pero admitió su responsabilidad política en la falta de comunicación entre su Gobierno Civil e Interior. En concreto, indicó que el departamento de Jaime Mayor no fue informado de las lesiones de Elejalde. Tampoco él, añadió, conocía su verdadero alcance, ya que se le dio "una información muy por encima". Sin ser preguntado, agregó que no supo de su hospitalización "hasta bastante más tarde de producirse".

El ex gobernador apuntó que la solución contra el terrorismo "será larga y compleja" y que "no caben los atajos". Apuntó que, en algún momento, "habrá que conjugar las actuaciones políticas con las policiales", pero matizó: "Nos hemos encontrado siempre con el goteo de muertos y con el chantaje de por medio no se puede jugar".

Condecoraciones a los agentes

El director general de la Policía, Juan Cotino, que se encuentra en Valencia para asistir hoy a una cumbre policial hispano-francesa sobre el terrorismo, reiteró ayer sus felicitaciones a los dos agentes y el alumno en prácticas que detuvieron a Elejalde por su "gallardía, valentía y profesionalidad".Mayor les impondrá el viernes la cruz al mérito policial con distintivo rojo "en un gesto de reconocimiento público" por llevar a cabo esa detención con "riesgo de sus vidas", según Interior.