Despidos, homofobia y política: las 10 polémicas que están incendiando ‘Operación Triunfo’ 2018
Algunas se han convertido en debate nacional y otras se han quedado en carne de comentario para Twitter, pero todas benefician a una edición que no alcanza el brillo de los concursantes de la anterior
La sensación que Operación Triunfo 2018 está dejando entre sus espectadores es agridulce: el formato ofrece momentos de emoción, pero la sombra de Amaia, Alfred, Aitana y demás concursantes de Operación Triunfo 2017 es demasiado alargada (y cercana en el tiempo).Y si el programa, con una audiencia en torno a los dos millones de espectadores, trasciende en ocasiones el interés de los seguidores entregados –en Twitter sigue siendo trending topic constante– es gracias a algunas polémicas.
“Cuando salgáis y os deis la hostia monumental, recordaréis que teníais un estudio de grabación aquí y bajabais con desgana. La hostia va a ser guapa, y no voy a estar ahí recogiendo los pedazos porque no puedo"
Noemí Galera a los concursantes
La última de esta edición ha sido el despido de Itziar Castro de su puesto como profesora de interpretación este pasado miércoles y el anuncio solo un día después de que Los Javis volverían al programa para sustituirla. Su paso por el programa vino marcado por la alargada sombra de los directores de La llamada, muy apreciados entre el público del programa tras su labor en la edición anterior. Itziar, alabada por algunos a raíz del incidente de la masterclass de los jóvenes por no ahondar de forma tan visceral en los sentimientos de los concursantes, había sido criticada de forma velada en las últimas semanas porque estos no lograban emocionar con sus actuaciones.
Los desencuentros con Manu Guix en torno al sentido que los cantantes debían dar a los temas también se habían manifestado en varios pases de micros, así como una posible mala relación con Noemí Galera sospechada por los “me gustas de Itziar” a tuits que criticaban su labor de casting. Esta teoría se vio confirmada por el comunicado de la actriz en su cuenta de Twitter, en el que, tras un primer momento en el que no se sabía si se trataba de un abandono voluntario o un despido, afirmó que “la decisión de que Itziar Castro no continúe como profesora ha sido tomada de forma unilateral por la dirección del programa y comunicada de forma precipitada y sin que Itziar Castro se lo esperase”; y remata: “Participar en Operación Triunfo ha sido una maravillosa experiencia para Itziar, con la que ha aprendido mucho como persona y como actriz. Y si volviesen a llamarla volvería a la Academia encantada y haría exactamente el mismo trabajo”.
Pero antes de llegar hasta este momento, tal vez el más controvertido de la edición por afectar a la continuidad de uno de los miembros del equipo, Operación Triunfo 2018 ya dejaron varios momentos que, en menor o mayor medida, hicieron que se hablase del programa por motivos casi siempre ajenos a la música. Son los siguientes, en orden cronológico.
El (casi) concursante etiquetado como “facha”
La primera polémica de Operación Triunfo 2018 llegó antes incluso de que empezase el programa. Cuando se difundieron los nombres de los 18 candidatos a entrar en la Academia, uno de ellos destacó de forma inmediata sobre los demás: era Luis Mas, un joven catalán que en sus redes presumía de una foto junto al rey emérito Juan Carlos. Esta imagen corrió rápidamente por Twitter, y apoyada por otras en las que Luis posaba junto a la torre Trump o al lado de banderas españolas, ayudó a construir en cuestión de horas una imagen de facha y pijo.
Todavía no se había emitido la primera gala y el aspirante a triunfito ya contaba con una legión de haters que clamaban por su expulsión y que pedían boicot al programa; aunque, ojo, también era el que contaba con mayor número de seguidores en su Instagram previo al concurso. ¿Cómo se resolvió todo? Llegó la Gala 0, Luis cantó “Carita de buena” con gallo incluido y el jurado lo puso en duda, dejando la decisión final en manos de la audiencia. El público votó y Luis se marchó.
'Operación Triunfo' no es odio
Si en la edición pasada de Operación Triunfo Miriam acaparó la mayoría de las antipatías de la audiencia, en esta pronto África se convirtió en el vórtice del odio. Un supuesto bullying a su compañero Damion provocó que algunos comentaristas del directo en YouTube pusieran emoticonos de serpientes cada vez que ella aparecía, y los insultos vertidos en Internet hacia ella –comentarios que, recordemos, no pueden leer dentro de la Academia– eran de una virulencia extrema.
Tanto es así que la dirección decidió colgar en todas las cuentas el mensaje “OT no es odio”, amenazando con emprender incluso acciones legales contra los autores de los mensajes más ofensivos. Miriam acabó siendo la tercera finalista de Operación Triunfo 2017 y una de las participantes con más éxito en su trayectoria tras el programa. África se convirtió en la segunda expulsada de su edición y en los próximos meses veremos cuál es su evolución profesional.
Sabela 'versus' Los Javis
Javier Calvo y Javier Ambrossi, profesores estrella de la pasada edición y desde ayer también de esta, volvieron a la Academia para dar una clase magistral en la que animaban a los triunfitos de este año a exteriorizar sus sentimientos y dejar salir sus emociones. Tanto fue así que a una de ellos, Alba Reche, estuvo a punto de darle un ataque de ansiedad. Posteriormente Sabela, concursante gallega con un grado en Terapia Ocupacional, criticó sus consejos diciendo: “Si dejas a una persona a flor de piel y después hasta luego, Maricarmen, aquí no pasó nada, eso no es muy real”.
Los comentarios a favor y en contra de unos y otros se convirtieron en una reflexión sobre el uso de métodos psicológicos adecuados para un programa de televisión y la necesidad de conseguir momentos intensos que puedan ser viralizados y emitidos en las galas. Los Javis respondieron a lo que bautizaron como “jaleíto” en sus redes, reafirmando: “No hay peligro en expresar tus emociones. Las emociones no son tabú”.
La clase de nutrición magufa
“Ojo con cenar fruta”. “Si vais a tomar chocolate, que sea chocolate negro, negro”. “Los veganos no tenéis todos los aminoácidos esenciales en la dieta”. La visita de la coach nutricional Anna Turón dejó algunas aseveraciones muy populares y repetidas, pero discutibles. Aitor Sánchez, conocido en Internet como Mi dieta cojea, le dedicó un vídeo en YouTube desmontando los preceptos allí vertidos y aprovechó para clamar en Twitter contra la presencia en televisión de este tipo de figuras. “El consejo dietético no es algo que deba darse a la ligera. Las clases de nutrición tienen errores graves. Os pido por favor que por los millones de personas que os ven, corrijáis esto pronto”. La clase fue retirada del canal de YouTube de Operación Triunfo y Anna Turón no ha vuelto a la Academia.
La 'mariconez'
Y llegó la (de momento) gran polémica de la edición de la mano de una letra de Mecano. Resumen para quien no se haya enterado de uno de los temas más comentados del mes de octubre: Miki y María tenían que cantar Quédate en Madrid, canción que reza “los cariñitos siempre me han parecido una mariconez”. Incómoda con el término, María sugirió cambiarlo por “gilipollez”. En un primer momento, Noemí Galera dijo haber hablado con el representante de Ana Torroja, que estaba de acuerdo , pero sugería emplear “estupidez” por ser más fino, pero en Twitter la excantante de Mecano desmontaba esa versión e incendiaba las redes, la prensa e incluso los escaños del Congreso: “YO NO HE AUTORIZADO a nadie cambiar la letra de una canción que sigo cantando hoy en día. No estoy de acuerdo en cambiarla y no soy quién para hacerlo”.
José María Cano, autor de la canción, también se manifestó contrario a cambiar la letra, y durante días no se habló más que de censura, los ofendiditos, de la homofobia interiorizada, de lo frágiles que son los millennials, lo rancios que pueden ser sus mayores y de las peores rimas de Mecano. Bajo su apariencia de mariconez (con perdón) de tema, estábamos en realidad ante un choque generacional de hondo significado y una batalla más de las guerras culturales que se están librando en torno al idioma y la revisión de tótems que creíamos bien asentados. Al final, en la gala Miki cantó “mariconez” y cuando terminó la actuación el público presente gritó de forma bien audible: “¡Estupidez, estupidez!”.
Arreglarse y estropearse
El debate en torno al uso del lenguaje continuó cuando Alba Reche, en clase de imagen personal, mostró su desacuerdo con el término “arreglarse”. “Parece que hay algo mal y me he arreglado, es cuestión del lenguaje. Entendemos el concepto, pero no me gusta utilizarlo”, dijo la joven ante la aprobación de la profesora Andrea Villalonga. “No sabéis lo que aprendo yo de vosotros”, respondió ella, ratificando la reflexión. Alba también ha destacado, junto a Miki, por emplear el lenguaje inclusivo en numerosas ocasiones, refiriéndose por ejemplo al grupo de hombres y mujeres participantes como “nosotras”.
“Me cago en la Falange”
En una conversación sobre otro tema, el ya exconcursante Dave comentaba: “Yo me he cagado en la Falange”. La directora de la Academia, Noemí Galera, apostillaba: “Bueno, ahí también me cago yo. Y si no, que vengan”. La reacción del grupo político no se hizo esperar y respondieron en Twitter acusándola de cínica, de pedir respeto a los chavales cuando ella insultaba a un partido político legal, “todo esto pagado con dinero público”. Por una vez el asunto no se quedó en un rifirrafe en redes.
El secretario de Falange remitió una queja por correo electrónico al defensor del espectador, queja que llegó hasta Toñi Prieto, directora de entretenimiento de TVE. En su respuesta a Falange, tanto Prieto como el defensor del espectador se disculpaban con el partido político y prometían tomar “las medidas oportunas para que este tipo de acciones no se vuelva a producir". La difusión del comunicado en OK Diario produjo, por supuesto, una contrapolémica en la que muchos se indignaban por las disculpas y arremetían de nuevo contra la formación en términos escatológicos similares. El mismo Dave, en su rueda de prensa al ser expulsado, declaró: “Me arrepiento por el 'me cago en la Falange', pero el sentimiento es el mismo”.
Además de maleducada @NoemiGaleraN es muy cínica. Porque les está pidiendo a los chavales que tengan respeto y ella insulta a un partido político legal como @fedelasjons
— Falange Española / ADÑ (@fedelasjons) September 28, 2018
Todo esto pagado con dinero público @rtve #OTDirecto28SEP
Encantados de ir a explicaros nuestras propuestas pic.twitter.com/jyXUzGQZI1
Las broncas de las profesoras
Primero fue Mamen Márquez, la coach vocal. Hace menos de una semana aparcaba su habitual buen humor para recriminar a los participantes su dejadez y falta de interés en el tema grupal que debían grabar ese día: “No puede ser que bajéis al estudio y no sepáis qué tenéis que cantar en la grupal”. “Es una falta de respeto la actitud de no tener las ganas de grabar”, añadió. El asunto fue retomado por Noemí, directora de la Academia, al visitarles en los días previos a que salgan a su primera firma de discos para intentar que bajasen un poco las expectativas y se concentrasen más en el trabajo diario.
“Cuando salgáis y os deis la hostia monumental, recordaréis que teníais un estudio de grabación aquí y bajabais con desgana. La hostia va a ser guapa, y no voy a estar ahí recogiendo los pedazos porque no puedo. Mi obligación es avisaros”, remarcó. También en la anterior edición del programa las advertencias de Noemí sobre la naturaleza efímera de la fama y el peligro de creerse el éxito demasiado pronto fueron una constante, claro que esos concursantes sí lograron realizar una gira exitosa cuyo final se ha pospuesto tres veces llenando estadios y liderando listas de ventas. Está por ver qué lograrán los de este año.
Campaña desigual
En todos los realities en los que hay voto del público se produce su correspondiente controversia en torno a campañas supuestamente deshonestas para salvar o expulsar a un concursante. En esta ocasión la primera de este Operación Triunfo ha venido a raíz de la nominación de Marta, joven malagueña propuesta para abandonar el programa esta semana que finalmente se quedó (venciendo a su compañero Damion). Todo se produjo a raíz de que en la cuenta de Twitter oficial de la Liga Endesa de baloncesto, los jugadores del Unicaja pidieran el voto para salvar a Marta.
“Si dejas a una persona a flor de piel y después hasta luego, Maricarmen, aquí no pasó nada, eso no es muy real”
Sabela sobre la clase con los Javis
“Un abuso”. “Campaña rastrera”. “Una barbaridad”. Estas fueron algunas de las reacciones a la campaña liderada por la madre de Marta. No falta quien recuerda que ya en la anterior edición los jugadores del Osasuna se marcaron un vídeo de apoyo a la pamplonesa Amaia, en la que se los veía vibrando con la interpretación del Shake it out de la joven, que acabó siendo la ganadora.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.