El Tribunal Superior de Galicia absuelve a dos de los procesados por el narcosubmarino de las Rías Baixas y reduce la pena a otros dos

El Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) ha absuelto a dos de los procesados por el narcosubmarino de las Rías Baixas interceptado cargado de cocaína en noviembre de 2019 y ha reducido la pena a otros dos, al estimar parte de los recursos interpuestos por los cuatro condenados que esperaban a la embarcación en tierra. La decisión judicial sí que confirma la condena de 11 años de cárcel impuesta por la Audiencia de Pontevedra para cada uno de los tres tripulantes del primer narcosubmarino apresado en Europa.

La sofisticada embarcación, que transportaba 3.068 kilos de cocaína, cuyo precio en el mercado ilícito superaba los 123 millones de euros, fue hundida deliberadamente por la tripulación en la playa de O Foxo, en Cangas (Pontevedra). Allí esperaban cuatro amigos del piloto Agustín Álvarez con los que había contactado telefónicamente, y habían creado un chat, para que le auxiliaran en una complicada llegada a las costas de Galicia en medio de una profunda borrasca.

Después de tres intentos frustrados de desembarcar la droga, la tripulación exhausta logró adentrarse con el batiscafo medio averiado en la ría de Vigo, pero los supuestos colaboradores no pudieron cumplir su cometido por lo que decidieron hundir la nave para tratar de ocultar la droga. Al final, todos fueron detenidos y condenados por el tribunal de la sección segunda de la Audiencia de Pontevedra que celebró el juicio en diciembre de 2021.

Ocho meses después de publicarse la sentencia, el alto tribunal gallego no ha variado el veredicto respecto a los tripulantes del narcosubmarino, pero ha estimado los recursos ―uno en su totalidad y tres en parte―de cuatro condenados, amigos de la infancia del piloto Agustin Álvarez, sentenciados por colaborar con el piloto y planear la logística del desembarco desde tierra.

Los magistrados han absuelto a uno de ellos, que había sido condenado a siete años de cárcel, al entender que su actuación, limitada a la aportación de ropa a los acusados que venían en la embarcación, “no favorece ni facilita el tráfico de drogas, pues su objetivo era el auxilio personal”. El delito contra la salud pública, según subraya el alto tribunal gallego, “se habría ya consumado” por parte de los tripulantes.

El TSXG también ha absuelto a un condenado a siete años de cárcel del delito contra la salud pública relacionado con el sumergible, al entender que “no hay prueba que lo incrimine”. Incide en que solo se corroboró su “conocimiento de una eventual operación de tráfico de drogas”, pero los jueces sí lo han considerado autor de otro delito contra salud pública en la modalidad de sustancias que no causan un grave daño a la salud porque localizaron cánnabis en su domicilio durante un registro. Por ello, lo han condenado a un año de prisión.

En cuanto a los otros dos procesados, la Sala de lo Civil y Penal del TSXG ha rebajado sus condenas ―de nueve años a 26 meses de cárcel, y de siete años de prisión a 18 meses de cárcel, respectivamente―, porque entiende que el delito contra la salud pública no lo consumaron, sino que lo cometieron en grado de tentativa. Los magistrados concluyen que estos dos acusados que estaban en tierra, no participaron en las operaciones previas al transporte ni llegaron a tener la disponibilidad efectiva de la droga.

La sentencia del TSXG no es firme y puede ser recurrida en casación ante el Tribunal Supremo. El piloto del narcosubmarino, el vigués Agustín Álvarez, y los otros dos tripulantes de nacionalidad ecuatoriana, Pedro Delgado y su primo Tomás Benitez, que continuarán en prisión, vieron reducida la condena al confesar los hechos durante el juicio.

El resto de los acusados y residentes en Vigo, Yago Rego, Rodrigo Hermida, Enrique Serantes y su hijo Iago, que eran, supuestamente, los encargados de ocultar el alijo en tierra, según el fiscal, rechazaron un acuerdo de conformidad y siempre negaron los cargos de complicidad en esta operación de narcotráfico.